CENTRO DEL PROFESORADO DE JEREZ

La Formación en Centros de Trabajo en la Unión Europea

Una de las modalidades del programa Erasmus+, quizá la menos conocida, es aquella que ofrece a los estudiantes de Formación Profesional (FP) la posibilidad de realizar el módulo de Formación en Centros de Trabajo (FCT) en la Unión Europea.

En realidad, no es algo nuevo. Ya se venía realizando bajo el paraguas del antiguo programa Leonardo da Vinci. La consideración de los Ciclos Formativos de Grado Superior como enseñanza superior, al igual que la universitaria, hace que el alumnado de estos ciclos pase a realizar este módulo de FCT bajo el programa Erasmus. De forma definitiva, el nuevo programa Erasmus+ incorpora también a los Ciclos Formativos de Grado Medio a partir de 2014, en lo que denomina acciones KA-1.

Una de las primeras acciones que tienen que realizar los centros que pretendan enviar a su alumnado de FP a empresas de la Unión Europea es solicitar la llamada carta Erasmus o carta ECHE, por sus siglas en inglés. El plazo para solicitarla suele comprender los meses de febrero y marzo del año anterior al de realización de las prácticas en la empresa.

El siguiente paso es presentar un proyecto. Los centros educativos pueden optar por realizar un proyecto propio, o bien, sumarse a algún consorcio, lo cual les permite descargarse de una parte de la gestión. Para Jerez han funcionado, hasta esta última convocatoria, un consorcio de la Consejería de Educación y otro que promovía el Ayuntamiento de nuestra ciudad.

¿Qué se le exige al alumnado para participar? Además de estar cursando FP de grado medio o superior, ser mayor de edad y tener conocimientos del idioma del país de acogida o, en su defecto, de la lengua inglesa. Pero también se pide tener capacidad de adaptación a una cultura e idioma diferentes. Para ello, es de destacar el papel de los Departamentos de Idiomas y de Orientación de los centros educativos, que intervienen en el proceso de selección colaborando en la preparación de los aspirantes antes de su estancia en el extranjero.

El alumnado de Grado Superior suele participar en la búsqueda de las empresas en las que pretende realizar su FCT, así como, llegado el momento, en la elección de la misma, siempre con el asesoramiento y supervisión del profesorado de la correspondiente familia profesional. No obstante, existen empresas intermediarias que pueden desarrollar esta labor, con el correspondiente coste para el alumnado. Como ahora veremos, este coste es asumible para los estudiantes de Grado Medio, pero no tanto para los de Grado Superior. Si se decide buscar por su cuenta, es normal hacerlo, como casi todo hoy en día, directamente en la Web o a través de redes sociales como LinkedIn.

¿A qué gastos tiene que hacer frente un estudiante de FP para su FCT con Erasmus+? Pues en principio, todos. Hablamos de los vuelos, el alojamiento, la manutención y el transporte en la ciudad de destino, a lo que se suele añadir un seguro sanitario complementario y los gastos de utilizar una empresa intermediaria para la búsqueda de la empresa en la que se realizarán las prácticas. No obstante, la subvención que se concede es cuantitativamente diferente según se trate de Grado Medio o Grado Superior. Para Grado Medio la beca concedida en las últimas convocatorias suele estar alrededor de los 4.300 euros con destino en Italia y los 3.700 euros con destino en Portugal. Para Grado Superior, suele estar entre los 1.375 euros con destino en Malta y los 1.675 euros con destino en Italia. Estos son, claro está, ejemplos de cantidades para la actual convocatoria y para los países citados.

La FCT suele durar tres meses. Además de lo que el alumnado aprende en relación a su profesión y en relación al idioma o idiomas que haya manejado, es indudable que el bagaje que suelen traerse de vuelta a nuestro país es mucho mayor. Han conocido otra cultura, ven otro mundo con sus propios ojos, han tenido que hacer frente a cuestiones cotidianas pero que, probablemente, no habían realizado hasta el momento como gestionar vuelos, alojamiento, hacer la compra, sacarse una tarjeta de crédito o abrir una cuenta corriente en una entidad financiera. Para algunos supone incluso una experiencia que trasciende los propios estudios, logrando un contrato de trabajo en el país de destino. Pero quizás, el mejor aprendizaje será la convivencia que se establece entre compañeros de piso y de trabajo. Algo impagable.

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