Una batalla ganada, pero aún queda mucha guerra. Así se toman los vecinos de La Constancia la firma, el pasado lunes, por parte del Ayuntamiento de los convenios de colaboración con los presidentes de tres bloques de la barriada donde se van a realizar las esperadas obras de rehabilitación. Estas tres comunidades corresponden al compromiso adquirido por el gobierno local en mayo de 2015, en un acuerdo en el que la Junta se comprometía por su parte a otros 4 bloques. Según este compromiso -complementario al convenio que firmaron Junta y Ayuntamiento en 2009 para la rehabilitación de toda la barriada- la Junta asumirá la financiación del 75% del presupuesto de las obras a ejecutar, mientras el Ayuntamiento se haría cargo del 25% restante.

"Por ahora el Ayuntamiento sí ha cumplido su palabra con la firma del lunes. Por contra, entendemos que la actitud de la Junta es miserable e indigna. Eso sí, no vamos a renunciar nunca a los acuerdos de 2009, porque fue un convenio de rehabilitación histórico por el que hicimos mucha presión. Jamás renunciaremos, no se puede jugar con el sufrimiento de los vecinos", denunció ayer el presidente de La Constancia, Francisco Flores.

El convenio de 2009 recoge el compromiso de la Administración andaluza a rehabilitar 32 comunidades de La Constancia. Hasta la fecha, sólo se han ejecutado la obra de cuatro, quedando 21 "sin que nos den señales", los 4 prometidos en mayo de 2015 por la Junta, "de los que tampoco sabemos gran cosa" y los 3 que se firmaron el pasado lunes por parte del Ayuntamiento. "La última noticia, no oficial, que tenemos sobre los 4 de 2015 es que están en un proceso administrativo que por razones burocráticas es muy lento. Pero teniendo en cuenta los antecedentes de tantos engaños y mentiras, no podemos evitar tener ciertas reservas sobre el comportamiento de la Junta", señaló Flores.

De los 21 bloques sobre los que no hay visos de procesos de rehabilitación, desde la asociación vecinal subrayaron que hay casos muy "críticos", como el de una señora mayor que lleva fuera de su casa 4 años y el de un matrimonio joven que se ha ido de alquiler por no poder estar en su casa. "Tenemos que decir que 11 de esas 21 comunidades se encuentran en una situación de emergencia social con graves problemas estructurales. Además, no sabemos si los bloques tiene vicios ocultos, por lo que el temor de los vecinos es más que justificado", remarcó el presidente del colectivo.

Ante este escenario, la asociación tiene sobre la mesa dos vías. La primera, seguir con las manifestación y lucha vecinal en la calle, opción a la que "volveremos cuando creamos que es el momento". "Paralizamos todas nuestras protestas porque no quisimos interferir en las elecciones, nos pidieron que no realizáramos nada cuando estuvo en Jerez José Tomás por la Feria... No se puede decir que no actuemos de buena fe, pero la paciencia se acaba", incidió Flores. La segunda vía que no descarta la asociación es la judicial. "Sería la última opción, pero está ahí. De hecho, tenemos quien nos pagaría el proceso porque al denunciar un presunto delito de prevaricación dolosa por inactividad de la Administración, iríamos por vía contencioso y sería un coste", avisó el líder vecinal, quien añadió que "también tenemos de nuestro lado al Defensor del Pueblo. A ver si hay al fin respuesta de la Junta".