El Juzgado de Instrucción número 1 de Jerez ha acordado la conclusión del sumario que investigaba el asesinato de Juan Holgado Castro la madrugada del 22 de noviembre de 1995 en la gasolinera de Martín Ferrador. Cabe destacar que dicho sumario quedó abierto después de que la acusación que ejerce el abogado madrileño José Miguel Ayllón en nombre de los padres del joven solicitara el análisis de una serie de pruebas a la espera de que éstas condujeran a la determinación de quién o quiénes asesinaron al empleado de la estación de servicio. Dichas pruebas eran, básicamente, análisis de huellas dactilares y de restos orgánicos con la esperanza de encontrar en ellos restos de ADN, algo que desgraciadamente no sucedió. El caso queda, al menos por el momento, definitivamente cerrado 13 años y casi dos meses después de que se produjera un crimen que marcó un antes y un después en la ciudad de Jerez.

Según explicó a este medio el letrado Ayllón Camacho, "el Juzgado ha hecho todas las pruebas que les hemos pedido, tanto el análisis de las huellas como del ADN y no se ha encontrado nada. Es por ello que ha acordado la conclusión del sumario con propuesta del archivo de la causa". El abogado destacó a este medio que todo el trabajo de laboratorio criminalístico "ha sido incapaz de encontrar ninguna linea de investigación".

Sobre la actuación del Juzgado de Instrucción número 1, José Miguel Ayllón señaló que "lo ha hecho muy bien. Cabe destacar que no cerró el caso de principio sino que hizo las diligencias que le pedimos para esclarecer la muerte de Juan. La queja en este tristísimo crimen debe estar más en la investigación en general así como en otros estamentos judiciales, porque tanto la familia como yo creíamos, y así lo seguimos manteniendo, que ya había suficientes pruebas para condenar a los encartados, con una testigo de cargo como es Yolanda Castro, que reconoció la chaqueta del Dominguín que le situaba en el lugar de los hechos. Con eso tenía que haber habido condena".

Sobre los análisis de las huellas y los restos orgánicos en busca de ADN, el letrado que representó la acusación particular destacó que "éstos han sido un fracaso de investigación muy grande y además sin ninguna posibilidad de solución o de resolución de este gravísimo delito. Sin embargo habría que dejar claro que no se logró esclarecer el caso por una mala gestión policial. Yo, a estas alturas, no acabo de creerme que no se encuentren trazas de ADN, no me lo acabo de cree, la verdad es que considero que aquí hay cosas que no se hacen bien".

Irónico incluso, Ayllón destacó a este medio que "algunas de las huellas son muy claras pero tras ser analizadas no se sabe a quiénes pertenecen. Y lo que te dicen los investigadores es eso precisamente: "No se sabe". Por lo visto fue algún marciano quien bajó a la tierra para asesinar a Juan Holgado en 1995".

Respecto al ADN, José Miguel Ayllón destaca matices que no le parecen serios: "Tras los atentados del 11-M se consigue encontrar ADN nada menos que en un hueso de aceituna y en un gorro. Pues bien, en el 'caso Holgado', con una serie de pruebas como prendas impregnadas en sangre, una medalla, un mechero y un cristal con una gota de sangre no se encuentra ADN alguno. Es evidente que no se ha estado al mismo nivel. Aquí hay medios extraordinarios para los delitos terroristas y ninguno para los delitos comunes. Además, a nivel de Jerez y de Andalucía la gestión policial fue muy pero que muy pobre".