Los centros de educación concertada de la ciudad mostraron ayer su repulsa a la posible reducción de líneas de cara al próximo proceso de escolarización, que dará comienzo el día 1 de marzo, con un acto conjunto que llevaron a cabo las 73 instituciones de este tipo que conforman las Escuelas Católicas de la provincia. Aunque cada centro organizó su concentración o acto adaptándolo a sus necesidades, sí hubo homogeneidad en la lectura de un manifiesto de quince puntos que bajo el hashtag #yosoydelaconcertada defendió las razones de su protesta.Entre esos quince puntos, las Escuelas Católicas de Andalucía destacan, por encima de todo, su intención por buscar “el diálogo, la colaboración y la complementariedad, no la confrontación”; y un “equilibrio” entre la educación pública y la concertada. Asimismo, exigen que los padres tengan “derecho a elegir el tipo de educación que quieren para sus hijos”, y que por tanto se respete “la demanda de las familias”; rechazado categóricamente que estos centros “sean clasistas o elitistas”. Del mismo modo, solicitan que los conciertos educativos “se deben conceder y renovar automáticamente por la administración a los centros que cumplan los requisitos legales”, y recuerdan que la enseñanza concertada “supone un ahorro económico a la sociedad andaluza”. Por último, en su punto quince, los centros tendían su mano “a la Consejería de Educación y comunidad educativa de ambas redes, para buscar, de manera conjunta, la mejor educación de los niños, niñas y jóvenes andaluces, que son los que verdaderamente importan”. En Jerez, las reivindicaciones se realizaron de diferente forma. En el colegio Hijas de San José, por ejemplo, todo el alumnado, acompañado del personal, docente y administrativo, comunidad religiosa, representantes del Ampa y padres y madres, se concentraron en el patio portando globos y banderas naranjas en los que se podía lemas alusivos a la defensa de la concertada. Algo parecido se dio en otros centros como las Salesianas San Juan Bosco, en el que los alumnos, acompañados por profesores y padres, realizaron un montaje en el que se podía leer la palabra libertad. En otro punto de la ciudad, en el colegio La Salle Mundo Nuevo, hubo además una suelta de globos en el patio. Esta misma iniciativa se efectuó en el María Auxiliadora de Monte Alto, donde los alumnos/as, en otro acto conjunto dentro de las instalaciones, también soltaron globos e incluso coreografiaron algún que otro tema musical. En la Compañía de María, por su parte, fueron profesorado, equipo directivo, padres y madres los que leyeron el citado manifiesto, mientras que en La Salle Buen Pastor, el salón de actos sirvió de escenario para dicha reivindicación. Allí, su director Manuel Jesús Quijano pidió “solidaridad” a todos los centros de la concertada “porque mañana te puede tocar a ti”, indicó, y mandó un mensaje a los políticos recalcando que “si es verdad que nuestros políticos apuestan por la educación ahora es el momento idóneo para demostrarlo”.Arropado por una representación del alumnado de 3º, 4º, 5º y 6º de Primaria y por un buen número de padres y madres, insistió en que “no queremos que se cierre ninguna línea, ni en la concertada ni en la pública” y propuso para el futuro un nuevo modelo teniendo en cuenta el descenso demográfico. “Si ha bajado la natalidad y muchos inmigrantes se han ido, se pueden bajar las ratios, así la calidad de la enseñanza será mejor”.Los actos concluyeron pidiendo a las distintas comunidades educativas su implicación en el calendario de protestas que las Escuelas Católicas llevarán a cabo durante las próximas semanas, primero el 18 de febrero con la manifestación colectiva en Cádiz y posteriormente el día 1 de abril en Sevilla.