Jerez

Llega a los tribunales ocho años después un alijo de 6.400 pastillas

  • Los acusados se acogieron al derecho de no declarar · La operación, poco antes de la motorada, la desarrollaron conjuntamente la Guardia Civil y la Policía Local

Uno de los grandes alijos de pastillas de éxtasis que se incautaron en la provincia y en toda la comunidad andaluza ha llegado a juicio después de ocho años. La Policía Local y la Guardia Civil aprehendieron en mayo de 2001 más de 6.400 pastillas de éxtasis que supuestamente estaban destinadas a venderse en la motorada de ese año, de hecho, la aprehensión de esa droga de diseño se produjo apenas unos días antes del fin de semana motero.

Los principales procesados por esta causa, se apunta especialmente como cabecilla y máximo distribuidor de esta sustancia en la zona a D.R.M., se acogió al derecho a no declarar y se ratificó de forma íntegra en lo que dijo anteriormente en la causa. No obstante, la fiscal realizó numerosas preguntas acerca de cómo operaba el entramado como las posibles entregas de drogas que se hacían en una cafetería cercana a la antigua estación de autobuses. Fue precisamente ahí donde se produjeron las primeras detenciones y se requisó una mochila con más de 6.400 pastillas de éxtasis. La defensa hizo constar además que hoy en día esa mochila está desaparecida, no así la droga, sólo el 'envase', como resaltó la representante del Ministerio Público.

Las defensas plantearon al inicio del juicio una serie de cuestiones previas entre las que destacaban sobre todo la de la vulneración de derechos fundamentales de los procesados, como el de las comunicaciones por las escuchas telefónicas que se hicieron a lo largo de varias semanas para ir siguiendo los movimientos de los encausados. Otra de las cuestiones fue la falta de notificación de algunos autos al fiscal, lo que implicaría la nulidad de las escuchas telefónicas. La sala desestimó una por una las cuestiones planteadas y la vista siguió adelante.

En esas llamadas, al menos en las que se pudieron escuchar ayer en la sala de vistas, se usa un lenguaje en clave para no mencionar la palabra mercancía, pastilla o droga. "Ruedas", "dame de lo mío", "o lo que a mí me gusta", son sólo algunas de esas expresiones para hacerse entender con el interlocutor. Hoy le tocará declarar a la Policía Local y la Guardia Civil.

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