Lectores sin remedio
El libro, paisaje tras la fiesta
La Policía ha pillado a un presunto delincuente con las manos en la masa: lo sorprendieron a pocos metros de una peluquería de caballeros de la barriada Madre de Dios cuya puerta acababa de forzar. Todo ocurrió sobre las siete y media de la mañana del pasado viernes, informó ayer la comisaría después de poner al detenido a disposición de la autoridad judicial con las diligencias instruidas.
Vecinos avisaron al 091 de que habían escuchado ruidos en el establecimiento de la calle Diego Fernández Herrera. La sala de radio policial avisó a una unidad de la Upr (Unidad de prevención y reacción) que se encontraba por las cercanías pues ese día había convocada una huelga por los sindicatos de Renfe. Los agentes interceptaron rápidamente al sospechoso en las cercanías del establecimiento y lo identificaron como J.L.R.G., de 56 años de edad, que "cuenta con un amplísimo historial delictivo merced a las numerosas ocasiones en que ha sido detenido", señaló la Policía.
Los agentes de la Upr le decomisaron en el cacheo el botín del robo: una hucha que contenía unos 200 euros, un ordenador portátil, un 'pen drive' y un telemando. Al parecer (dijeron ayer los empleados del establecimiento afectado) el presunto ladrón se echó también varios tragos de vino de una pequeña bota que tiene la peluquería para agasajar a sus clientes. El detenido como presunto autor de un robo con fuerza fue puesto a disposición del juzgado de guardia.
Por otro lado, comerciantes denunciaron ayer este medio que un descuidero sustrajo un teléfono móvil de última generación y de elevado precio a otro ciudadano mientras éste se desayunaba en el velador de un bar de la alameda del Banco. El ratero aprovechó un despiste del afectado para hurtarle el móvil y huyó rápidamente sin que pudiera ser localizado. Luego varias personas, que vieron la acción del delincuente, se ofrecieron a la Policía para acudir a la comisaría e intentar la identificación del ratero en los álbumes de las personas fichadas por otros delitos. Precisamente el pasado viernes otro descuidero sustrajo unos 90 euros de la caja de un bar de la misma zona, que actualmente muy transitada por turistas. La Policía no descarta que el autor de este hurto pudiera ser el mismo hombre que cometió el robo ocurrido ayer.
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