Un enorme estruendo alertó pasadas las dos de la madrugada del pasado domingo a los vecinos del Olivar de Rivero, donde un cajero de Unicaja fue literalmente reventado. El motivo no era otro que el robo de dicho cajero, aunque poniendo en práctica un modus operandi que hasta ahora no se había llevado a cabo en nuestra ciudad ni tan siquiera en la provincia.

Esta nueva forma de asaltar los cajeros automáticos sí que se ha repetido en numerosas ocasiones en otros puntos de Andalucía, sobre todo en Córdoba y Málaga. En esta última se han producido en circunstancias similares hasta media docena de situaciones desde el verano hacia acá y en localidades como el Rincón la Victoria, Málaga capital y Mijas. Curiosamente la más reciente fue el pasado fin de semana.

Este tipo de robos consiste en la detonación de una carga explosiva para tratar de hacerse con los billetes del interior del almacén del cajero. La explosión se consigue mediante un gas que se introduce en el interior del cajero y que explosiona tras la creación de una chispa. La deflagración destrozó por completo el local, incluyendo cristaleras y todo el material decorativo existente. Tal fue la magnitud de la explosión que algunos cristales y trozos del interior se encontraron al otro lado de la calle.

Los delincuentes, una vez perpetrado el robo, huyeron en el interior de un vehículo negro, una característica similar a la sucedida en otros puntos de Andalucía como Málaga, de ahí que la propia policía, cuya investigación está abierta, no descarte que haya similitudes y que sea la misma banda la que esté actuando por toda la zona occidental.

Los vecinos asistían ayer con especial estupor a lo sucedido, sobre todo teniendo en cuenta que el cajero está situado en los bajos de un edificio de viviendas. Desde primera hora de la mañana fueron muchos los que se acercaron a comprobar el estado en el que ha quedado el cajero y la violencia de la explosión.