El primer año del consejo que preside Dionisio Díaz no tuvo cambio alguno del tan traído tema de la carrera oficial. Fue un año de transición para buscar el segundo año en el que, según siempre se desprendió del propio consejo, el pleno de hermanos mayores solicitó al órgano cuya competencia es precisamente la de organizar el paso de las cofradías en los días de Semana Santa, un cambio de este itinerario común. Fue así como tras barajar algunos proyectos con poco vigor, se quedó como buena la idea la de hacer una carrera oficial que dejara a un lado las zonas abiertas de Cristina y Mamelón para llegar hasta la zona de Aladro. La idea ya se barajó hace algunos años, y colocaba el corazón del paso de las cofradías por la zona de Tornería y la plaza del Banco. A partir de ahí, los miembros del consejo se pusieron a trabajar duro sobre esta misma idea. Medidas, balconadas y árboles gigantes como el que centra la atención de la zona del Banco eran detalles que había que ir limando. Poco a poco, el puzzle iba tomando forma. Pero faltaba algo tan importante en estos tiempos como era la seguridad.

En este sentido, el teniente de alcaldesa responsable de seguridad, Francisco Camas, presidió el pasado martes la primera mesa de seguridad de cara a la Semana Santa 2018 en la que estuvieron presentes algunos miembros de la Unión de Hermandades de Jerez junto a su presidente Dionisio Díaz, así como representantes de Policía Local, Policía Nacional, Protección Civil, Bomberos y de las delegaciones municipales de Cultura y Movilidad. En este encuentro, y tal y como había adelantado este medio en la edición del pasado día 3 de julio, se planteó, por parte del consejo local de Hermandades y Cofradías la posibilidad de llevar a cabo algunas modificaciones en la carrera oficial que hacen las cofradías en los días de Semana Santa. En este sentido, dicho consejo da a conocer, a través de un comunicado, que "serán valoradas por los distintos integrantes de la mesa desde el punto de vista de la seguridad".

Además, en el comunicado hecho público por parte del consejo, se afirma que si las propuestas planteadas fueran posibles en materia de seguridad, se estudiará, por parte del organismo que aglutina a las cofradías jerezanas "si la misma se considera viable desde el punto de vista cofrade y se llevaría a un pleno extraordinario de hermanos mayores, tal y como se comprometió el presidente de la Unión de Hermandades de Jerez en el Pleno celebrado el pasado mes de julio". En este sentido, lo que se pretende por parte del consejo es llevar el salvoconducto de la seguridad al pleno de hermanos mayores para ofrecer un nuevo itinerario con el visto bueno del Ayuntamiento. Una idea y un proyecto que nace dentro del seno del órgano que organiza la Semana Santa jerezana. Según se desprende del comunicado de la Unión de Hermandades, "en los próximos días, se convocará una nueva reunión de trabajo para seguir evaluando las propuestas presentadas en esta reunión".

Estas nuevas reuniones para ir dándole forma al capitulo de la seguridad pueden llegar a buen puerto si tenemos en cuenta que se buscan zonas más acotadas y huir de espacios abiertos por razones de obvias ante el peligro de atentados, con lo que es muy posiblemente que este peldaño pueda ser subido.

En cualquiera de los casos, con esta reunión llevada a cabo entre representantes del consejo local de Hermandades y Cofradías de Jerez y la misma mesa de seguridad, se da por hecho que todo cuanto este medio publicó el pasado día seis de julio respondía a una información totalmente contrastada, a pesar de que la misma fue desmentida a través de un comunicado de prensa del ente con sede en Curtidores. En aquella ocasión, desde estas mismas páginas se daba a conocer un proyecto en el que las cofradías pasaban a llegar a la carrera oficial a través de la calle Tornería para ir buscando la conocida plaza del Banco, lugar que se convertiría en el corazón del paso de las hermandades por la ciudad, para ir tomando la calle Larga de cara a la llegada a la Catedral jerezana. Una carrera oficial que está más cerca que nunca de ser una auténtica realidad.