El gobierno municipal sometió ayer al dictamen de la comisión informativa de Fomento y Desarrollo Territorial las doce alegaciones al PGOU de Jerez que llegaron al Ayuntamiento a última hora e impidieron aprobar de forma provisional el documento en un pleno extraordinario convocado para el pasado lunes y que finalmente ha quedado aplazado para pasado mañana. Dichas alegaciones, que no han influido finalmente en el diseño final del documento, fueron rechazadas por el gobierno local en solitario.

En rueda de prensa, el delegado de Urbanismo salió al paso de la polémica que ha rodeado el registro de entrada de estas reclamaciones, pues Correos negó ayer toda responsabilidad en el retraso e incluso verificó que ocho de las doce alegaciones fueron entregadas en el Consistorio jerezano entre los pasados días 16 y 17. En cambio, Urbanismo no las tuvo en su poder hasta el pasado viernes 26 y el registro de entrada municipal las selló el 25. En todo caso, Crisol sostuvo que tratan de esclarecer qué ha ocurrido para que se haya producido dicha demora y reiteró que en ningún caso ha responsabilizado al operador postal del aplazamiento del citado pleno.

En este contexto, el PSA, a través de su portavoz, Juan Román, ha pedido depurar responsabilidades porque en un "asunto tan importante como es el PGOU y para el que van con tanta prisa, es muy grave lo que ha ocurrido". Por su parte, el concejal del PP, Javier Durá, expresó, a raíz de la polémica por los retrasos en las alegaciones, que "si este PGOU estaba lleno de despropósitos, contra informes, opacidad en la documentación, con este tema se introduce un factor más de incertidumbre que conlleva a acrecentar la confianza de los ciudadanos y de la oposición en la capacidad de gestión de Pilar Sánchez y su equipo". Durá solicitó, igualmente, que se investigase el asunto.