Los más de diez años de suplicio que han padecido los vecinos de la calle Manga de La Barca por el continuo paso de camiones está a punto de solucionarse. La alcaldesa, Pilar Sánchez, rubricó ayer un convenio con una amplia representación de las empresas extractivas y transportistas de graveras para el acondicionamiento para el tránsito provisional de camiones de un tramo de la Cañada Real de Albadalejo. La regidora socialista se mostró "muy satisfecha, porque ello solucionará en gran medida las continuas molestias que el paso de estos vehículos ocasiona, fundamentalmente, a los vecinos de La Barca". "El documento", aseguro la alcaldesa, "es fruto de la buena disposición de la delegación provincial de Medio Ambiente, que ha autorizado al Ayuntamiento el uso y acondicionamiento de la vía pecuaria; de los empresarios, que de manera conjunta correrán con el coste del necesario adecentamiento de la cañada; y de los trabajos y gestiones que han venido desarrollando los técnicos de la delegación de Medio Rural, que ya lograron un preacuerdo con los transportistas el pasado mes de diciembre".

Por su parte, los representantes de trece de las empresas afectadas, Manuel y José antonio Braza, aseguraron que en el plazo de "entre diez y doces días" este trazado alternativo "permitirá que tanto los transportistas como los vecinos salgamos ganando". Al mismo tiempo que añadieron que se trata de un camino que será fundamentalmente utilizado por los camioneros que se dirigen a las canteras de San José del Valle y a las graveras de La Barca. "El tránsito diario de vehículos pesados será aproximadamente de un centenar de camiones", apuntaron los portavoces presentes ayer en la firma.

Por su parte, la alcaldesa destacó sobre el convenio firmado que "su coste para el Ayuntamiento de Jerez será cero, puesto que son los propios empresarios los que correrán con gastos derivados del acondicionamiento y mantenimiento, cuyas labores sí serán, no obstante, supervisadas por los técnicos municipales". El espacio concreto que será habilitado con materiales reciclados y sin impacto visual o ambiental es un tramo de 1.000 kilómetros de longitud por cinco metros de anchura de la vía pecuaria Cañada Real de Albadalejo que une las carreteras CA-501 y CA-9018, y el permiso tiene carácter provisional para el tráfico de vehículos motorizados no agrícolas, según la resolución emitida por la delegación provincial de Medio Ambiente el pasado 5 de noviembre de 2007.

La propia delegada de Medio Rural, María del Carmen Martínez, se mostró ayer satisfecha por el acuerdo alcanzado "que pone fin al problema que han sufrido durante muchos años los vecinos de la calle Manga y San Isidro, que han padecido incluso cuadros de estrés". Por estos motivos, felicitó también a los transportistas afectados "que se han mostrado colaboradores desde el primer momento, porque hay que recordar que ya se llegó a un pre-acuerdo a finales del pasado año, que ha culminado con la firma de este documento".