El último capítulo de la crisis del sector de la construcción se vivió ayer en la localidad costera de Puerto Real, concretamente, en una de las promociones de la zona conocida como Casines.

El Grupo 'Kicap', una empresa familiar con apenas un año de vida propiedad de un empresario jerezano, comunicó ayer a sus 42 trabajadores que no podía pagar sus nóminas al carecer la compañía de la liquidez suficiente.

Según explicó a este periódico su responsable, Carlos García, esta empresa contratada por el grupo DHO se encontró ayer con un grave problema: las entidades bancarias ya no le facilitaban los créditos que hasta ahora sí le habían permitido pagar con regularidad a su plantilla. Así, Carlos García comunicó a sus empleados que esta empresa constructora ya no podrá seguir haciéndose cargo de las 68 viviendas de Protección Oficial que ya están en sus últimas fases, y tan sólo a dos o tres meses a lo sumo de ser entregadas. "La obra se va a terminar y DHO ya ha comunicado que se hará cargo de las nóminas". El problema con el que también se ha encontrado 'Kicap' es que se ha visto atrapada por las circunstancias. Así, cabe destacar que muchas de las empresas afectadas por la crisis del sector de la construcción deben aún realizar pagos que Carlos García cifra en unos 450.000 euros (unos 75 millones de las antiguas pesetas), correspondientes a 17 devoluciones con cargo a negocios como 'Jale', 'Fivesur' y otras firmas, todas ellas en crisis como es público y notorio. "Hemos acordado liquidar esta obra, con las penalizaciones que nos correspondan; lo que tengo absolutamente claro es que no volveré a acometer una obra de esta envergadura", sentenció Carlos García, que es propietario de otras dos empresas más, otra empresa constructora y Telesierra Tharsis.