La espectacular detención en la zona de Divina Pastora de dos jefes de un clan de la Camorra no ha sido la primera operación de gran envergadura que se ha realizado en Jerez contra organizaciones delictivas de origen italiano: en verano de 2000 agentes del Cuerpo Nacional de la Policía se enfrentaron a tiro limpio con miembros de la 'Ndrangheta' -otra organización delictiva cuya origen es la isla de Calabria- a la altura del cruce del hotel Jerez.
En aquella ocasión, como lo ocurrido esta misma semana, la colaboración entre las fuerzas de seguridad de distintos países fue clave para apresarlos: la Policía fue alertada por sus colegas transalpinos de que posiblemente una 'familia' de la 'Ndrangheta' intentaba blanquear dinero. Dicho y hecho: el chivatazo permitió apresar a los individuos. Eran miembros de uno de los eslabones de una cadena de delincuencia organizada que estaba compuesta por unos 250 sujetos en 2000. Para situarse, el tiroteo se produjo en una época donde el euro no existía, Internet estaba casi en pañales para el gran público y los teléfonos móviles los poseían, precisamente, los integrantes de bandas organizadas. Los cuatro apresados constituían una las principales familias de la ''Ndrangheta' de Bresccia que estaba dedicada a la comisión de todo tipo de delitos contra la propiedad y la salud pública.
Evidentemente, señalan los expertos de las fuerzas de seguridad, las intervenciones antimafia en Jerez -por muy aparatosas que hayan podido ser a ojos de la opinión pública- no tienen ni punto de comparación con las constantes redadas contra integrantes de otras bandas internaciones que se han venido desarrollando en la Costa del Sol. En la provincia de Málaga han sido detenidos decenas de fugitivos que se esconden allí ante la proliferación de urbanizaciones residenciales.
Los mafiosos prendidos en 2000 eran los lugartenientes- como se presupone que es Rafaelle Vallefouco con respecto al capo Giuseppe Polvorino- de una 'familia' de la 'Ndrangheta' que quería invertir su dinero ilegal en negocios legales. Los calabreses no tenían iniciativa propia; obedecían órdenes de sus jefes de buscar pantallas para lavar dinero.
Las autoridades españolas han destacado el importantísimo esfuerzo que las instituciones y ciudadanía italianas están desarrollando contra las diferentes mafias del crimen organizado -cuyas denominaciones cambian en función de su lugar de origen-.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios