"Aunque algunos no lo crean, todavía existen bastantes obstáculos para los que circulamos en silla de ruedas. Por favor, señores de la limpieza urbana, no pongan ustedes más".

Quien así se expresa, de manera tan educada y amable, es Enrique Morales Franco, un vecino de Jerez, de la calle Atalaya, en la zona de La Plata. Sólo pide que los contenedores que existen en esta calle, situados en el acerado, no se muevan más allá de dificultar el paso de quienes tienen que desplazarse en silla de ruedas.

"La frecuencia no es mucha, pero sí 3 ó 4 veces  al mes hay días que algún vecino joven los empuja hasta el borde de la acera con lo que la frecuencia cuando yo paso queda reducida", explica Enrique. La foto que ilustra este ejemplo, con Enrique Morales, lo demuestra.