EDUCACIÓN

¡Cómo está el patio!

Las últimas declaraciones del Consejero de Educación a un periódico andaluz no dejan indiferente a nadie. Hay de todo, desde la formación del profesorado (con expertos fuera de clase para entrar en las de otros a enseñarles, por ejemplo) hasta el tema de las jubilaciones (no más de los "sesenta y poco"). Ganas me quedan de rebatirle su evaluación sobre el Plan de Calidad y las conclusiones que saca de la aplicación de las Pruebas de Evaluación de Diagnóstico, cuando aún la Agencia Andaluza de Evaluación Educativa no ha comunicado los resultados de los estudios socioeconómicos de los centros, con los que salen los resultados definitivos de las pruebas, y por lo tanto aún no se pueden tener lo datos finales.

Pero lo que tiene cabida aquí, en nuestra página de lectura, es esa parte en la que dice: "Si aparecen centros con bajo desempeño en lectura, es razonable que podamos prescribir el incremento de la lectura. ¡Pero no tenemos que hacerlo con todos!". Y cuando el periodista que le entrevista le refiere que ya está establecido en el currículo (por aquello de que ya aparece en ley lo de la media hora diaria), el Consejero contesta: "Pero tenemos capacidad normativa para hacerlo".

Luego habrá que estar muy atentos a esa capacidad normativa que puede convertir la autonomía de los centros en un dispensario de dosis "recetadas" desde afuera. Y lo que es peor seguir sin preguntarse por el qué (y cómo, y por qué, y donde…) leer en esa más de media hora, solo en "leer".

¿Cuentos?

De nuevo está convocado el "Certamen de Cuentos Para flipar con la vida". Siempre está bien el incentivar la expresión escrita y el perseguir una vida sana alejada de cualquier dependencia. Pero hay dos cuestiones en la convocatoria que, a mi entender debieran cuidarse, una en la forma y otra en el fondo.

Respecto a la forma, siendo un texto que "Se considera necesario la lectura de estas bases por cada participante", no debería tener las más de treinta faltas en puntuación, uso de mayúsculas y tildes que contiene, junto con alguna de concordancia (y el discutible uso de la @ para convertir palabras en masculino y femenino a la vez).

Respecto al fondo, recordar que un cuento debe ser uso estético del lenguaje, y distinto es que tenga que tratar sobre un tema a que tenga que forzosamente incluir una serie de "ideas generales que deben aparecer", convirtiendo las composiciones en pretextos más que en textos.

Es una opinión por si la delegación municipal correspondiente quiere tenerlo en cuenta para otra vez.

José García Oliva. Especialista en literatura infantil y juvenil.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios