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El peligroso patrimonio de Estella

  • Las administraciones ultiman algunos flecos para la demolición y reconstrucción de la torre de la ELA

Hubo una época en la que los caminos eran de tierra, las carreteras prácticamente eran un elemento futurista y moverse en bicicleta, un lujo al alcance de muy pocos. No hace tanto tiempo, quizás apenas un par de generaciones han pasado desde que los desplazamientos eran toda una odisea si superaban los cinco o seis kilómetros. Por aquel entonces, en los pueblos y ciudades se construían altas torres con la intención de que los forasteros vislumbraran desde lejos la ubicación de los diferentes lugares a los que pretendían llegar.

Con el paso del tiempo, quizás esta función se acabó perdiendo, pero no así las torres. La mayoría situadas junto a las iglesias y también utilizadas como campanarios, las entidades locales autónomas y las barriadas rurales pertenecientes al término rural de Jerez cuentan con este tipo de elementos que en muchas ocasiones pertenecen al obispado de Asidonia-Jerez. Con el paso de los años, además de quedar en desuso su principal función, también se ha ido deteriorando su exterior.

Una de las que peor aspecto presenta en estos momentos en Jerez es la de Estella. La entidad local autónoma cuenta con este elemento situacional desde que los colonos decidieran construir la por entonces pedanía a mediados del pasado siglo XX. Con el paso de los días y los meses, la situación de esta torre de más de 30 metros es deplorable. Se intentó culpar a la cimentación del terreno, sin embargo el problema no es ese: la estructura está dañada por el paso del tiempo y la erosión producida por los diferentes factores climáticos ha provocado la caída de algunos cascotes. La lluvia, además, se cuela por dentro de una estructura que vivió tiempos mucho mejores.

Tal es el estado de esta torre que el año pasado el obispado ya intentó derribarla. No obstante, la junta de gobierno local del Ayuntamiento de Jerez decidió rechazar esta propuesta, ya que se trata de un elemento identificativo del lugar, incluido en el registro de patrimonio de la Junta de Andalucía.

Pero es un tema que viene de antaño y que ha convertido a esta torre en la de la discordia en más de una ocasión. Desde la legislatura de Blas Moreno, el ayuntamiento de la ELA lucha para que el Obispado reconstruya esta torre que es uno de los elementos distintivos del pueblo. Ahora, con Ricardo Sánchez a la cabeza parece que se conseguirá el objetivo gracias al apoyo del Ayuntamiento de Jerez, el de la ELA, la Diputación. Las administraciones han limado las asperezas que les enfrentaban y ahora sí se producirá una obra que el alcalde pedáneo se marcó como objetivo al comienzo de su legislatura.

Se han producido ya tres reuniones entre estas administraciones y solo queda una cuarta, que se producirá antes de que concluya la primera quincena del mes en curso. En ella se acordarán los últimos flecos antes de realizar una intervención que consistirá en la demolición y reconstrucción de una torre idéntica a la actual. "Todos vamos a aportar nuestro granito de arena", afirmó Ricardo Sánchez, que explicó: "La torre se hará exactamente igual que la actual". Cabe destacar que el montante de la obra está estipulado en torno a los 80.000 euros y será financiado por todas las administraciones.

Hasta ahora solo se ha actuado perimetrando la zona con vallas leoneras que impiden el paso de los viandantes a la zona más cercana a esta torre. Tal y como señaló el actual alcalde de la Entidad Local Autónoma, Ricardo Sánchez, la actuación que debe acometerse es "urgente". Y es que cabe recordar que junto a esta torre se sitúa el mercadillo de Estella, por el que cada domingo pasan cientos de personas. Además, se trata de uno de las partidas que más ingresos reporta de forma directa a la Entidad Local Autónoma.

Esta vez parece que todo está encaminado y la actuación urgente que necesita esta torre comenzará a llevarse a cabo antes de que concluya el verano.

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