La maquinaria de la vendimia se pone en marcha. La preparación de los primeros pies de cuba en algunos pagos de interior de la zona de Gibalbín anuncian un madrugador inicio de la vendimia del Marco, que sin embargo acumula cierto retraso en las viñas más próximas al litoral. Es la disparidad del Marco a la que ayer se refirió el director del Consejo Regulador del vino, César Saldaña, para explicar que la vendimia propiamente dicha no se generalizará hasta la segunda quincena de agosto, siempre que el tiempo acompañe, ya que un exceso de calor y sequedad puede adelantar la campaña.

Si las temperaturas se mantienen suaves y las noches húmedas, será a partir del 20 de agosto cuando se empiece a generalizar la recolección de la uva 'palomino' en el Marco, salvo en los pagos de interior más avanzados, como los de Gibalbín, donde en cuestión de días arrancará la vendimia de 2013 del Marco.

Pero hay otros viñedos de la campiña jerezana que están ya en plena vendimia. Es la otra vendimia del Marco, la de las varietales que se emplean en la elaboración de los vinos no amparados por la denominación de origen del jerez, como los blancos jóvenes que elabora Barbadillo para la exportación con la varietal 'verdejo', que la firma sanluqueña ha comenzado a recolectar a máquina en la viña Santa Lucía, también en la zona de Gibalbín.

Pasada la medianoche, las máquinas se ponían en funcionamiento bajo las órdenes del capataz de la viña próxima a la localidad sevilla de El Cuervo en este pequeño anticipo de la vendimia del Marco con mayúsculas, la de la monovarietal 'palomino' con la que también se elabora Barbadillo el 'Castillo de San Diego', su afamado vino blanco de la Tierra de Cádiz y el más vendido de España.

Pero mientras que para la recolección de las variedades blancas y tintas con las que se elaboran los vinos tranquilos de la indicación geográfica protegida de la provincia rige en exclusiva el criterio del enólogo, para la vendimia 'oficial' del Marco hay que esperar a que la uva alcance los 10,5 grados beaumé que establece como mínimo imprescindible el reglamento del vino de Jerez. Sólo entonces, los viticultores y bodegas del Marco pueden iniciar la recolección de la uva para su molturación en los lagares inscritos en el Consejo Regulador, garante del cumplimiento de las normas y de la calidad del producto.

"Hoy -ayer para el lector-, los primeros lagares, los de los pagos del interior, los pagos de Gibalbín, han empezado con esa cosa especial que se llama pies de cuba, para los que se coge la uva más madura que sirve para que muy poquito a poco comience la fermentación para que cuando entre el resto de la uva en las condiciones idóneas se produzca el milagro de convertirla en vino", anunció ayer el director de la institución jerezana del vino durante la presentación de las Fiestas de la vendimia.

Pese al avanzado estado del cultivo de la vid en los pagos de interior, y en concreto los de Gibalbín, Saldaña puntualizó que, según sus cálculos, "será en la segunda quincena de agosto cuando podamos decir que ya estamos de verdad en vendimia", para las que se mantiene la previsión de una cosecha de en torno a los 60 millones de kilos, de los que sólo 52 millones se calificarían, es decir, se podrían destinar a la elaboración de los vinos de Jerez.

El director del Consejo también matizó este dato, toda vez que recordó que "la vendimia del año pasado fue muy corta; tuvimos una sequía muy importante y fue un año complicado". Por contra, el responsable institucional del vino subrayó que "este año ha sido magnífico desde el punto de vista meteorológico, con casi 800 litros por metro cuadrado de lluvias en algunas zonas y más de 650 litros en la mayoría, por lo que las viñas están que dan gusto verlas. Es impresionante cómo está la uva. Está sana, hemos tenido también una primavera benigna, con lo cual las previsiones son una subida alrededor del 30% con respecto el año pasado".

En el argot de las bodegas se dice que agosto tiene la llave de la vendimia, de ahí la cautela del director del Consejo en sus declaraciones: "No quiero hablar mucho que después viene el mes de agosto y depende de los vientos, si tenemos mucho levante se acelerará todo el proceso de maduración de la uva, pero si tenemos el clima de ahora, que es perfecto, con una temperatura entorno a 30 grados, pues se retrasará"

Los viñistas independientes coinciden en líneas generales con las previsiones oficiales del Consejo, si bien retrasan unos días la generalización de la vendimia, hasta el 23 o 24 de agosto. En este sentido, el presidente de la sectorial de viñas Asevi-Asaja, Francisco Guerrero, explica que aunque en algunas zonas del interior se ha recuperado el retraso de dos semanas que acumulaba la viña, en los pagos próximos al mar sigue habiendo algo de demora, e incluso afloran brotes aislados de botrytis, la podredumbre gris que en este caso asoma por las importantes 'rociadas' de la última semana en racimos muy apretados y que retienen más la humedad.