El próximo 6 de diciembre, la temporada de zambombas en el Villamarta se abre con un clásico, la que organiza anualmente la Federación Local de Peñas Flamencas. En esta ocasión será la peña Antonio Chacón la que ponga en marcha una iniciativa que este año responde al nombre de 'Molchibe Calli' (Navidad Gitana) con la dirección de Pepe del Morao y un elenco artístico en el que sobresalen nombres como María José Santiago, Jesús Méndez, Fernando de la Morena y Luis Moneo, entre otros.

-¿Cómo van los ensayos? ¿Lleva mucho tiempo preparando el espectáculo?

-Los ensayos van bastante bien llevamos alrededor de 2 meses y lo estamos haciendo con todo el cariño del mundo y cuidando todos los detalles al máximo, tenemos muchas ilusiones puestas en este proyecto.

-¿Hablamos de una zambomba tradicional aunque también con un toque actual, ¿no?

-Es tradicional porque la zambomba es la verdadera protagonista del espectáculo y porque los villancicos elegidos son de autores jerezanos. También es muy jerezana con los que yo llamo los tres reyes magos de nuestra Navidad, Manuel Parrilla, Antonio Gallardo y Fernando Terremoto hijo. De todas formas, no son los únicos autores porque también hay cosas del Nene y otros autores, pero eso sí, siempre cuidando muchos los detalles para guardar el equilibrio y respetar esa tradición que ello tanto guardaron.

-El año pasado Molchibe Calli, bajo su dirección, fue un éxito en la Atalaya. Este año da el salto a Villamarta, ¿es su reto más importante?

-Para mí es más un regalo que un reto y pienso que es la recompensa al trabajo que nos pegamos también el año pasado. Creo que el éxito de la pasada Navidad fue darle toda la importancia a la música dejando de lado todo lo demás. Ese fue nuestro propósito, romper la tendencia de los temas por villancicos y acordarnos de los que nos preceden y ese concepto ha sido la clave del éxito , así que el premio es aún mayor. Creo que todos los que nos dedicamos a esto de verdad siempre tenemos los cinco sentidos en la música, nuestra vida, así que todos los días tenemos nuestros propios retos y el mejor regalo de Navidad es estar en Villamarta.

-Cambia mucho tratar con gente joven, como ocurrió el año pasado, a hacerlo con artistas como Fernando de la Morena, Luis Moneo, Bernardo Parrilla...

-No demasiado, quizás sea hasta mejor porque es a ellos a quienes se les pide consejo, la experiencia es un grado. Aquí somos todos una familia y el vinculo es muy cercano, por eso no me lo tomo de esa manera. Cuesta más dirigir a los jóvenes (risas). Para nosotros es un privilegio contar con artistas de la talla de Tío Fernando, Luis Moneo, María José Santiago, Jesús Méndez, Diego del Morao, Curro Carrasco, por citar a algunos.

-Usted aparte de guitarrista lleva en la sangre eso de dirigir...

-Supongo que sí (risas), aunque la verdad es que nunca me lo planteé. Ha surgido de forma natural y tengo que decir que no es tarea fácil, no te puedes relajar ni un momento, son muchas cosas, pero lo hago con mucha ilusión. En esta vida del artista nunca se sabe lo que te puede pasar y hay que estar preparado para todo.

-Supongo que en esta faceta recurrirá a su abuelo Manuel Morao. ¿Le da algún tipo de consejo?

-La verdad es que he tenido la suerte de recibir la educación artística y personal de mi pare Manué, como yo le llamo, y tengo muy claro sus puntos de vista. Siempre lo tengo en mi sentío, porque llevo desde niño escuchándolos. Me pasa igual que con el Tato Morao porque también tuve la suerte de hacer espectáculos similares con él de los cuales he aprendido mucho y hoy lo pongo en práctica.

-Este año hay tres zambombas en Villamarta, ¿hace eso que los artistas os exijáis más?

-Desde mi punto de vista hay que tener la máxima exigencia en todo, vayas donde vayas y esté quien esté. Salir al ruedo es lo más difícil por eso creo que lo bonito de esto es que cada uno defienda su manera y su concepto al hacer las cosas. Yo voy a intentar transmitir la manera que tengo de sentir la música y por eso me centro en lo mío sin mirar para otro lado.

-Lo peor en la dirección de este tipo de espectáculos es coordinar a tanta gente...

-Sí, eso es lo más complicado, mover a tanta gente e intentar transmitir disciplina. Somos todos jóvenes y en el coro propiamente dicho, creo que el más joven que ha pasado por Villamarta pero también tengo que decir que hay mucho talento. Esto último creo que es lo más importante, te asegura el éxito siempre que sepas usarlo y vaya marcado bajo unas pautas.

-¿Cómo se presentan estas fechas para Pepe del Morao?

-La verdad es que no me puedo quejar, tengo que dar gracias a Dios porque tengo un mes de diciembre cargado de trabajo, y toco madera para que siga (risas).