Los responsables de las Unidades de Gestión Clínica del hospital (los jefes de servicio en el antiguo modelo organizativo del Servicio Andaluz de Salud) han entregado un escrito al gerente del centro hospitalario, Manuel Herrera, donde muestran su desacuerdo con las medidas de recorte que contempla el plan de ajuste de la Junta y se desvinculan del compromiso de la gestión que implican estas unidades, para dedicarse sólo al aspecto puramente asistencial. "Rompen con todo lo que es la burocracia para dedicarse al paciente, nada de elaborar estadísticas para que otros se pongan la medalla", manifestó ayer Rafael Iglesias, miembro de la junta de personal del hospital, quien agregó que si no por la totalidad, el escrito ha sido firmado por la mayoría de los jefes de las UGC. "Es como si a estas unidades les quitas la G y se quedan sólo con la C", explicaba gráficamente. El plante de estos responsables se prevé, según los miembros de la junta de personal, que pueda ser seguido por otros cargos como los supervisores de planta, a la espera también de que los médicos decidan otro tipo de medidas más allá de las concentraciones, como ya está ocurriendo en otros hospitales. Aunque aún sin consensuar los facultativos han propuesto acciones como trabajar "a reglamento" , con el cumplimiento estricto de los protocolos y dejar al margen temas como la formación o la docencia.

Ayer trabajadores del SAS de todas las categorías volvieron a concentrarse a las puertas del hospital Materno-Infantil, convocados por la junta de personal. En la concentración se recordó el atropello que sufrieron el miércoles once compañeros del hospital de Puerto Real cuando cortaban el tráfico a las puertas del centro sanitario por los recortes. Los trabajadores dedicaron un largo aplauso a los heridos, para dirigirse posteriormente a la pasarela sobre la antigua N-IV donde volvieron a cortar el tráfico durante alrededor de diez minutos, coreando consignas contra las rebajas salariales. Un día más la Policía Local tuvo que desviar el tráfico en ambos sentidos para aliviar las largas retenciones de vehículos en una carretera ya colapsada por las obras del desdoble.

La junta de personal ha decidido que las movilizaciones no se interrumpan hasta la aprobación del plan de ajuste, aunque, según dijo Gabriel Ruiz Ordóñez, otro de sus miembros, en estos momentos no hay abierta ningún tipo de negociación con los sindicatos. "Si al final el plan se aprueba tal como está planteado, las acciones serán mucho más drásticas", advirtieron los representantes de la plantilla, criticando las subvenciones y ayudas que sigue concediendo la Junta a determinados programas. "Sólo hay que ver el BOJA. No se enteran que en un situación así no pueden darse todo tipo de ayudas".

En los centros de salud, las concentraciones de las plantillas se mantienen de forma más desigual. Médicos de estas instalaciones han empezado a organizarse para llevar a cabo también otra serie de medidas de presión, tras un encuentro que mantuvieron el pasado miércoles en la sede de Jerez del Colegio Médico. Facultativos que asistieron a esta convocatoria, en la que se acordó también la creación en Facebook de un grupo de 'médicos recortados', señalaron que ahora sondearán el respaldo que estas medidas tienen entre el resto de los facultativos de los centros de salud y mantendrán una nueva reunión la próxima semana. En cualquier caso indicaron que las acciones que se adopten "no repercutirán en la calidad de la asistencia ni se perjudicará al paciente. Al contrario, se trata de mejorarla".