El PSOE confirmó ayer una obviedad: su candidata a las elecciones municipales de 2019 será la alcaldesa, Mamen Sánchez. Este derecho ya lo tiene de manera oficial tras haber concluido en estos días el proceso de designación de alcaldables puesto en marcha en las agrupaciones socialistas. Pero el privilegio se lo ganó el pasado 17 de noviembre cuando fue elegida secretaria local del PSOE al imponerse a Isabel Armario. Una derrota en aquel congreso le hubiera supuesto un panorama incierto; en cambio, la victoria le dejó el camino expedito para repetir cartel en 2019.

Eso sí, restaba ratificarlo, un trámite que no ha sido posible hasta ahora ya que el partido no había iniciado los correspondientes procesos. Pero el nuevo reglamento federal de desarrollo de los estatutos del PSOE, aprobado por la ejecutiva de Pedro Sánchez el pasado mes de febrero, ha allanado el camino a los alcaldes para que optaran a la reelección sin apenas oposición. Así, los primeros ediles socialistas, como Mamen Sánchez, solo tenían que mostrar su intención de querer presentarse.

En cambio, al resto de aspirantes en agrupaciones de ciudades de más de 50.000 habitantes, se les ha exigido que la mitad de la militancia de la agrupación les avale. En el caso de Jerez se hubieran requerido unos 200 respaldos aproximadamente, una cifra que, conseguida por algún militante, hubiera supuesto una censura en toda regla a la gestión de la regidora.

Por ello, no ha causado sorpresa que ayer el PSOE local anunciara la ratificación de Mamen Sánchez como candidata y certificara la ausencia de candidaturas alternativas. De este modo, Mamen Sánchez volverá a optar a revalidar una Alcaldía que logró en junio de 2015 gracias a un acuerdo de investidura con Ganemos e IU. En los pasados comicios su candidatura fue la segunda más votada, tras el PP, con 21.778 papeletas.

Ahora en los siguiente meses el federal deberá convocar otro proceso interno para elegir la lista que acompañará a Mamen Sánchez. En este caso, el reglamento también ha modificado el sistema de designación ya que antes la ejecutiva provincial tenía potestad para diseñar la candidatura -de hecho en 2015 a Sánchez se le impuso una lista-.

Ahora, los nuevos estatutos establecen que la ejecutiva local podrá presentar una lista teniendo en cuenta la opinión de la candidata. Pero cualquier militante puede presentar una candidatura alternativa (salvo para el puesto número uno). Y se da la circunstancia añadida de que el PSOE ha impuesto la votación mediante listas abiertas por lo que el orden planteado en las propuestas que se hagan, tanto de la ejecutiva como las alternativas, no tendría que coincidir finalmente con el elegido por la militancia.

Y aún es pronto también para hablar de nombres pero, salvo sorpresa, se prevé que los ediles Laura Álvarez, Santiago Galván, José Antonio Díaz, Francisco Camas y Carmen Collado estén en puestos de salida. La duda está a día de hoy en Isabel Armario, desvinculada de la gestión municipal.