Un grupo de anarquistas italianos de extrema izquierda se atribuyó el envío de una carta-bomba lista para explotar al presidente del Deutsche Bank, Josef Ackermann, confirmaron ayer fuentes de seguridad y judiciales en Alemania.

El sobre tamaño Din A-5 llegó el miércoles a la sede del principal banco alemán en Fráncfort. Los empleados lo consideraron sospechoso y alertaron a la Policía, que comprobó que el paquete tenía "una bomba muy peligrosa y con poder explosivo", señaló ayer la oficina criminalística en el Estado federado de Hessen.

"No era un explosivo ni militar ni comercial", explicó el portavoz policial Alexander Kiebling. Sin embargo, la apertura del sobre "habría sido sin duda un peligro" y podría haber provocado quemaduras en la mano o la cara, añadió.

La investigación encontró un escrito de reivindicación firmado por el grupo FAI-Federazione Anarchica Informale", según la Fiscalía General de Fráncfort, que calificó al grupo como una "organización terrorista y anarquista".

El FAI se atribuyó en el pasado otros atentados contra organismos públicos europeos, sobre todo en Italia. En el escrito anunciaba "tres explosiones contra bancos, banqueros, garrapatas y chupasangres".

Los investigadores cuentan por eso con que hay otras dos bombas escondidas y aún no localizadas.

Según las fuentes, el mismo grupo reivindicó en 2003 un intento de atentado con carta-bomba a la sede del Banco Central Europeo (BCE) en Fráncfort.