El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha ordenado al ministro de Vivienda y Construcción, Uri Ariel, un cese temporal de la licitación de proyectos de asentamientos judíos en Cisjordania y Jerusalén Este, informó ayer la radio del Ejército israelí.

La orden coincide con los esfuerzos en las últimas semanas del secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, con el fin de reanudar el estancado proceso de paz entre israelíes y palestinos, para lo que éstos últimos demandan que se paralice la construcción de nuevos asentamientos.

Altos oficiales israelíes indicaron al diario Haaretz que Netanyahu ha prometido a Kerry "frenar" la construcción de asentamientos hasta mediados del próximo mes de junio.

Según la radio militar, el primer ministro se reunió hace unos días con Ariel y le ordenó paralizar la publicación de nuevos proyectos de licitación para construir 3.000 viviendas en asentamientos de Jerusalén Este.

Los portavoces del primer ministro y los del titular de Vivienda rechazaron pronunciarse sobre esta información, al igual que el propio Ariel, quien vive en un asentamiento y es el número dos del partido ultraderechista Habayit Hayehudi, formación que defiende a los colonos y aboga por continuar construyendo en los territorios ocupados.

La diputada de este partido Ayelet Shaked indicó a la radio militar que el Ministerio de Vivienda ha preparado nuevos proyectos de licitación para los bloques de asentamientos en Cisjordania y lamentó que el primer ministro no los haya firmado.

La semana pasada, Ariel advirtió que su formación no apoyaría los presupuestos del Gobierno para 2013 en el Parlamento si no se financian plenamente los proyectos de construcción de asentamientos en Cisjordania.

Los planes de construcción de 3.000 viviendas en asentamientos de Jerusalén Este fueron anunciados el pasado noviembre en respuesta al reconocimiento de Palestina como Estado por parte de la Asamblea General de la ONU.

Estos proyectos -que incluyen el plan de construir en la polémica zona E-1, entre el gran asentamiento de Male Adumin y la zona oriental de Jerusalén- no han avanzado, sin embargo, desde entonces.

La presión internacional para que Israel congele sus planes de construcción se ha incrementado además en las últimas semanas, especialmente después de que la Liga Árabe anunciase una modificación de su plan de paz de 2002 que incluye algunos intercambios de territorio dentro de las fronteras de 1967.