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Ultraortodoxos judíos contra el servicio militar

  • Netanyahu quiere acabar con la exención que permite dedicación exclusiva al estudio de la Torá

Los ultraortodoxos judíos se han rebelado contra una ley de servicio militar obligatorio que pondrá fin en Israel a más de sesenta años de exenciones automáticas, y prometen dar la batalla antes de abandonar su ultraconservador estilo de vida, dedicado en exclusiva al estudio de la Torá.

"A todos aquellos que piensan en el mal de apartar de la Torá a nuestros estudiantes, el Todopoderoso confundirá sus ideas, desmerecerá sus pensamientos y dará su represalia", prometió en su último sermón el prominente rabino Ovadia Yosef, máximo líder espiritual de los judíos sefardíes.

En un lenguaje rabínico plagado de metáforas y amenazas divinas, el líder espiritual del judaísmo oriundo de la España medieval y de los países árabes se sumó a sus colegas askenazíes (de origen centroeuropeo) en la tajante oposición a que sus jóvenes abandonen el estudio de los textos sagrados para servir en el Ejército.

Una demanda contemplada en el proyecto de ley que prepara el Gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para un "reparto equitativo" de la obligación de la seguridad, según un fallo del Tribunal Supremo, que tachó de "discriminatoria" la ley de exenciones de 2002.

La "histórica revolución en el tema del alistamiento", como ya la definen algunos políticos porque terminaría con unas exenciones que comenzaron con la fundación del Estado de Israel, en 1948, exigirá una cuota mínima de reclutas a partir de 2016.

De los 8.000 jóvenes ultraortodoxos en edad militar, 3.200 deberán ir a filas, 2.000 prestarán algún tipo de servicio social y otros 1.000 quedarán exentos por razones médicas o psicológicas, calculó la comisión que prepara la ley, que será de aplicación gradual durante tres años.

Otros 1.800 serán declarados estudiantes prodigio de la Torá y seguirán su formación rabínica de forma indefinida, a diferencia de sus compañeros, que a los 21 años deberán alistarse.

El Gobierno israelí espera aplicar esta fórmula a partir de agosto. Para aprobarla, el partido ultraderechista Israel Beitenu exige una legislación similar de servicio civil para la minoría árabe, mientras que el ministro de Defensa, Moshé Yaalón (del partido derechista Likud, el principal de la coalición de gobierno) instó a eliminar la "obligatoriedad" en el alistamiento.

"O hay equidad en la obligación de la seguridad o el Gobierno se vendrá abajo", amenazó el dirigente del partido Yesh Atid y ministro de Finanzas, Yair Lapid.

Donde no hay división es en la comunidad ultraortodoxa, que, a pesar de sus propias discrepancias internas, se ha unido para salir a esta batalla. "Está tajantemente prohibido ir al Ejército y si es necesario entregaremos en ello nuestras vidas", advirtió el gran rabino de la corriente lituana askenazí, Shmuel Doitch, ante los más de 30.000 miembros de su comunidad que se concentraron en Jerusalén el pasado día 16 en una violenta manifestación.

Desde entonces dos ultraortodoxos que prestan servicio en una unidad religiosa voluntaria han sido agredidos por ir de uniforme por un barrio de la comunidad, y otros han denunciado que fueron expulsados de sus sinagogas.

A raíz de las últimas expresiones de violencia y de varias amenazas, el Ejército canceló una jura de bandera programada en Jerusalén de la brigada ultraortodoxa Netzah Yehuda, que funciona desde hace unos años con el apoyo de algunos rabinos.

A diferencia de un soldado normal, que cobra en el mejor de los casos menos de 800 shekels (unos 216 dólares o 167 euros) al mes, un ultraortodoxo casado puede acceder a prestaciones de hasta 5.000 shekels (1.045 euros o 1.351 dólares), aliciente al que se agrega la posibilidad de estudiar una profesión.

Es el caso de Shlomo Tzin, que se acogió al programa de voluntariado militar Shajar para poder mantener a su familia. "La decisión tiene varios ángulos: hay uno de sionismo y otro profesional. Sin estudios, casado, no era fácil encontrar un buen trabajo, y en ese sentido el Ejército es una plataforma excelente".

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