Walter Veltroni, líder de la izquierda italiana hasta el pasado martes, pidió ayer perdón en Roma al explicar su renuncia y solicitó unidad a la dividida izquierda italiana para poder luchar por un cambio radical.

Veltroni reconoció que no ha podido conducir al éxito el partido creado en 2007, aglutinando las formaciones de centro izquierda. "No lo he conseguido y pido perdón por ello", dijo Veltroni en la sede de su Partido Democrático en Roma.

"Tenemos que superar la personalización y la división", señaló, al tiempo que pedía que de una izquierda de salón, pesimista y sustancialmente conservadora surja una centroizquierda innovador.

Berlusconi ha ganado "la batalla por la hegemonía" en la sociedad porque con los medios a su alcance ha conseguido dar la vuelta al sistema de valores. Por ello hay que luchar, pero no en el frente del "anti Berlusconismo", sino por el valor de la democracia, manifestó Veltroni.