áfrica Un informe detalla una de las peores tragedias del siglo XX

¿Qué hizo Francia en Ruanda?

  • Una comisión de investigación ruandesa sobre el genocidio en 1994 acusa al Ejecutivo francés de François Miterrand de participar en la matanza de tutsis

El ministro de Justicia de Ruanda, Tharcisse Karugarama, lanzó un potente fuego de artillería contra Francia: "Los soldados franceses estuvieron implicados en los asesinatos de la minoría tutsi, así como de hutus que escondían a tutsis", dijo el martes durante la presentación de un informe de 500 páginas de la llamada comisión Mucyo.

Durante alrededor de dos años, la comisión de investigación dirigida por el ex ministro de Justicia Jean de Dieu Mucyo interrogó a supervivientes y testigos del genocidio ocurrido en 1994.

El informe publicado ahora habla del papel de Francia antes, durante y tras el genocidio de más de 800.000 tutsis y de hutus moderados y asegura que "Francia protegió a las tropas responsables del genocidio e hizo muy difícil que fueran llevadas ante un tribunal", según acusó Karugarama.

Además de la acusación general de haber desempeñado un papel activo en una de las mayores tragedias del siglo XX, el informe de la comisión Mucyo ofrece los nombres de 20 representantes del Ejército francés y 13 políticos, entre ellos el del entonces presidente francés François Miterrand, ya fallecido, y su hijo Jean-Christophe, así como varios miembros del entonces gabinete de Gobierno galo.

Ya durante el trabajo de la comisión se filtraron a la opinión pública varias informaciones que establecían relaciones entre Francia y el régimen hutu en Ruanda, indicadoras de la existencia de cierta complicidad.

Un experto en finanzas de procedencia alemana aseguró haber detectado enero de 1994 la "desaparición" de al menos mil millones de francos procedentes de un fondo de seguros. Sus investigaciones concluyeron que el dinero había ido a parar a una operación de los servicios secretos franceses y a la compra de armas para el Gobierno de Kigali.

Otros testigos europeos declararon que también durante los 100 días del genocidio entró en Ruanda armamento francés, lo que supuso una clara ruptura del embargo armamentístico.

El general Romero Dallaire, director de la misión de las naciones Unidas en Ruanda durante el genocidio, ya había criticado en el pasado con dureza el comportamiento de Francia. El Gobierno francés debe ser consciente de que "sus aliados fueron los arquitectos de la matanza", escribió en sus memorias.

El general cita el intento de Francia de proteger a las milicias hutus especialmente durante el transcurso de la Operación Turkis, que consistió en un corredor humanitario en el suroeste de Ruanda durante el avance del ejército tutsi que volvía del exilio. "Los criminales creyeron que los franceses llegaron en su salvación y que tenían manos libres para concluir su horrible trabajo", escribe Dallaire. Miles de milicianos hutus que literalmente habían cortado en pedazos con sus machetes a sus vecinos tutsis huyeron a Zaire. Incluso hoy en día milicias hutus se enfrentan al general de origen tutsi Laurent Nkunda en el este del Congo.

Karugarama dejó hasta ahora abierto si Ruanda, como se recomienda en el informe, interpondrá acciones legales contra los franceses citados por la comisión. "Este es un informe de investigación, no un acta penal", alega.

Por su parte, la ministra de Información ruandesa, Louise Mushikiwabo, destacó que el informe debe "empujar a Francia al suelo de la verdad", ya que se trata de aclarar hechos históricos.

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