El paro es un viejo conocido de muchos gaditanos. En muchas ocasiones, la larga permanencia en las listas del desempleo o el desencanto que produce no encontrar oportunidad alguna hace que la salida de ese largo túnel parezca imposible.

Para luchar contra esta sensación, pero también realidad incontestable, la Junta de Andalucía puso en marcha en 2000 la red Andalucía Orienta. Bajo este nombre se esconden cientos de profesionales que tienen un único objetivo: enseñar a cada parado que acuda a estas oficinas el camino idóneo y personalizado que le ayude a encontrar el trabajo pretendido, o bien, conseguir una formación que le permita más tarde acceder al mercado laboral. Es lo que en estas oficinas llaman IPI: Itinerario Personalizado de Inserción.

En cada provincia, Andalucía Orienta dispone de un centro de referencia (normalmente ubicado en cada capital). Junto a esta oficina, una red de unidades de orientación. En la provincia de Cádiz, este centro de referencia se encuentra en plena Avenida (frente al edificio de los sindicatos) y, en total, existen 35 unidades de orientación: diez en la capital;cinco en Jerez; tres en Puerto Real; cinco en el Campo de Gibraltar (dos en Algeciras, otras dos en La Línea y una en San Roque); cuatro en el Bajo Guadalquivir (Chipiona, Rota, Sanlúcar y Trebujena); tres en la Sierra (Arcos, Olvera y Villamartín); dos en La Janda (Medina y Vejer), y tres más en la Bahía de Cádiz (Chiclana, San Fernando y El Puerto). Los encargados de atender las 36 oficinas en total son 125 profesionales, entre administrativos y técnicos.

Una de las ventajas de esta red es que se sigue un protocolo de actuación gracias al que, si un desempleado acude a una oficina en Vejer, tiene las mismas garantías y se le trata igual que si acudiese a la de la capital. En este aspecto incide mucho la responsable del centro de referencia de Cádiz, Nieves Guerra.

Los datos avalan a este sistema. En el último año (desde el 1 de enero de 2007 a 31 de enero de 2008), han sido atendidas en las diferentes oficinas de la provincia 21.400 personas. Todas han recibido su propio IPI (hay personas que no entran en este Itinerario por decisión propia).

Del total, 10.121 desempleados encontraron trabajo, lo que supone un 47,3 por ciento. De ellos, 874 consiguieron el objetivo de su Itinerario, lograron su objetivo profesional diferente a la contratación. Como explica Nieves Guerra, "el objetivo es la contratación, pero puede haber otros objetivos. Por ejemplo, que una persona quiera trabajar a medio-largo plazo pero en ese instante reconoce no estar preparada; entonces el objetivo es saber qué cursos hay, cómo se busca esa información. Puede que no encuentre trabajo, pero el primer objetivo es conseguir esos recursos, con lo que hace un curso y ahí se detiene el IPI porque ha conseguido ese fin. Después se puede abrir otro Itinerario para encontrar trabajo. Ese objetivo lo han conseguido 874 personas".

Para la responsable de esta oficina, "lo verdaderamente importante es que haya una persona que se responsabilice de que encuentres un empleo, y así se solventan muchos problemas de quien va a las oficinas del SAE y no encuentra nada o dice que no lo llaman". Además, Nieves Guerra tiene claro que no es cierto que los desempleados menos cualificados sean los casos más difíciles. "También trabajamos las competencias profesionales, una visión integral de la persona", asegura.

De hecho, los colectivos que más se atiende en esta red son mujeres, jóvenes y discapacitados. Además, Andalucía Orienta posee entidades especializadas en discapacidad e, incluso, por tipo de discapacidad. También hay servicios especializados en personas en riesgo de exclusión social como mujeres o jóvenes.

A la hora de realizar un IPI, Nieves Guerra explica que "es más difícil para el que lleva más tiempo en el paro, porque se pierden referencias y psicológicamente también afecta, pierde estímulos de cómo está el mercado, y conforme pasa el tiempo la autoestima va bajando". Sin embargo, este servicio no es un trámite. Un grupo de personas "motivadas y volcadas en ayudar a la gente en paro" se encarga de conseguir ese perfil. "Lo importante -finaliza- es que no se da la palmadita en la espalda ni se lleva de la mano al desempleado, sino que se le ayuda a que aprenda dónde están los recursos y cómo conseguirlos".