No es la primera vez que ocurre ni será la última, pero no por ello deja de indignar a las organizaciones que trabajan con los migrantes. La saturación existente en los recursos de acogida ante el fuerte aumento en la llegada de pateras se ha traducido una vez más en la liberación de grupos de extranjeros sin ningún tipo de apoyo de las ONG. Frente al procedimiento habitual, que pasa por un centro de internamiento de extranjeros o la búsqueda de un recurso asistencial en la amplia red concertada con las organizaciones, grupos de migrantes salen de las comisarías sin asesoramiento ni ayuda de ningún tipo, siendo asistidos por las ONG que los detectan o a las que ellos mismos llegan por su propio pie, así como por los servicios sociales de los ayuntamientos. Así ha ocurrido en las últimas horas en Algeciras, El Puerto y Jerez.

Desde el pasado sábado han llegado a las costas andaluzas más de 900 personas en patera. De ellas, 618 han arribado a la provincia de Cádiz, a los puertos de Barbate, Tarifa y Algeciras. Y los recursos policiales y asistenciales se han visto desbordados.

El procedimiento ante la llegada de extranjeros de forma irregular pasa en primer lugar por la comisaría de Policía Nacional: allí son derivados los que llegan en patera hasta que puedan ser recibidos por el juez. Los calabozos de las comisarías están repletos: el lunes se llegaron a contabilizar en Algeciras 180 personas. En ellos los detenidos pueden pasar un máximo de 72 horas; antes de cumplir ese plazo tienen que pasar a disposición judicial y el juez decidir el destino del migrante. Este puede ser derivado a un centro de internamiento de extranjeros(CIE); en el caso de Cádiz está el de Algeciras y Tarifa, pero también pueden ser enviados a otras provincias. El primero está lleno; al segundo se está derivando solo a migrantes marroquíes, que tienen garantizada su expulsión por convenio con Marruecos.

Otra alternativa es la puesta en libertad de los migrantes previo aviso a las ONG, buscando una plaza en alguno de los centros de acogida existentes. Pero estos también están saturados: tanto Cruz Roja como Cepaim, en el caso de Algeciras, como Accem en Jerez y los recursos existentes en El Puerto están repletos. Y las llegadas no cesan.

Ante esa situación, la Policía Nacional está optando por dejar en libertad a grupos de migrantes sin un destino definido y sin conocimiento de las ONG. En Algeciras, un grupo de personas ha acudido hoy a una ONG en busca de apoyo. Pero también en Jerez o El Puerto, donde los ayuntamientos han activado dispositivos de emergencia para atender a los migrantes que habían quedado en la calle.

Jerez

En Jerez, trabajadores de Accem se han encontrado hoy en la puerta de su sede a seis jóvenes subsaharianos que habían pasado la noche en la calle tras haber cumplido el tiempo máximo en la Comisaría de Jerez. Un vecino ha llevado a otro joven a Accem tras encontrarlo en la calle y conocer su situación y dos mujeres han podido dormir en el albergue municipal tras su salida de Comisaría y llamar a la puerta de este servicio municipal prácticamente de madrugada. A la organización sin ánimo de lucro le ha llamado especialmente la atención que se dejara en la calle a dos mujeres sin que tuvieran alojamiento puesto que es un colectivo “muy vulnerable y puede ser víctima de trata”.

En los últimos dos días, Accem ha tenido que buscar alojamiento de forma urgente a 34 migrantes. Ayer se ubicó a 21 varones, 2 mujeres y 2 niños en centros de la red Accem a nivel estatal (en Castilla La Mancha) y hoy se ha conseguido techo para estas nueve personas entre un recurso de Accem en Córdoba (ahí están las dos mujeres), cuatro chicos están en Hogar La Salle y tres en un recurso social en El Puerto que se consiguió a través de Cáritas. A partir del martes, Hogar San Juan acogerá a los siete jóvenes. “Los compañeros invitaron a desayunar a los chicos porque estaban hambrientos. Estamos en un momento en el que no paramos, pero la Red de Jerez funciona bien y hemos podido ubicar a estas personas”, ha explicado Rodrigo Gómez, responsable de Accem.

Desde el Ayuntamiento han informado que desconocían que se pondría en libertad sin un alojamiento a estas personas, “puesto que de saberlo hubiéramos buscado soluciones antes de que durmieran en la calle”. La alcaldesa, Mamen Sánchez, subraya que “si nos avisan de que tenemos que acoger a ‘x’ personas hubiéramos podido reunirnos con las asociaciones para buscar soluciones, incluso adaptar instalaciones para evitar que duerman en la calle. El Gobierno nos debe informar”.

El Puerto

Un grupo de veinte subsaharianos ha aparecido también esta mañana en las calles del centro de El Puerto. Han sido los propios vecinos los que han avisado al Ayuntamiento de la situación, ya que vagaban sin rumbo y su presencia causó cierta extrañeza entre la población. El Ayuntamiento, que no tenía conocimiento alguno de la situación, se ha puesto en contacto con la Policía Nacional, cuyos responsables le han confirmado que se trataba de personas que habían cruzado el Estrecho en patera y que, ante la falta de espacio en las comisarías del Campo de Gibraltar y tras pasar el plazo máximo de tiempo permitido retenidos en la Comisaría portuense, habían sido puestos en libertad.

Ante esta situación de emergencia humanitaria tanto el alcalde, David de la Encina, como el concejal de Bienestar Social Ángel M. González y la concejala de Políticas de Integración, Matilde Roselló, han optado por llevar a estas personas al centro de emergencia social que regenta la entidad Anydes en La Florida. El problema es que este centro está ya saturado, aunque finalmente se ha optado por ubicar allí a las mujeres del grupo. En cuanto a los hombres, han sido trasladados al pabellón municipal Jóvenes Portuenses, en la Zona Norte de la ciudad, donde pasarán hoy la noche y se les dará de cenar.

David de la Encina ha lamentado la situación humana de estas personas y ha criticado que se detenga a estas personas y luego tengan que quedarse en la calle por falta de capacidad de las instalaciones disponibles.

El subdelegado del Gobierno en la provincia ha llamado por la tarde al alcalde para explicarle la situación de falta de capacidad en las dependencias policiales de la provincia. De la Encina lamenta que no se haya avisado con más tiempo al Ayuntamiento para haber podido facilitar alguna solución.