Recuperación caladero

La flota de cerco del Golfo de Cádiz se somete a una parada técnica de dos meses

  • Algunos barcos artesanales de Barbate van a tramitar sus licencias para regresar al caladero de Marruecos en enero

La mayoría de los barcos artesanales dedicados a la modalidad de cerco llevan varias semanas amarrados.

La mayoría de los barcos artesanales dedicados a la modalidad de cerco llevan varias semanas amarrados. / A.B. (Barbate.)

Las flotas de cerco y palangre que faenan en las aguas del caladero nacional del Golfo de Cádiz, entran desde este uno de diciembre y hasta el uno de febrero de 2022 en una parada técnica que servirá para regeneración de especies como el boquerón, la sardina, el jurel y la caballa.

Muchos de los barcos que ahora amarran oficialmente en sus puertos de origen, ya llevan varias semanas sin faenar, al no acompañar las condiciones meteorológicas, y para evitar agotar las cuotas que tienen adjudicadas, sobre todo de boquerón, ya que pretenden que se alargue hasta principios del verano de 2022, que es cuando se revisa esta cuota por campaña, mientras que para la sardina ese cómputo es anual.

Muchas de estas embarcaciones no volverán a faenar hasta principios de abril

Muchas de estas embarcaciones no volverán a faenar hasta principios de abril, ya que para esa fecha las condiciones climatológicas habrán mejorado, y también se podrían alcanzar mejores precios para sus productos en las lonjas.

Por otro lado, las tensiones diplomáticas que mantienen España y Marruecos, llevó a la flota a no acudir al caldero marroquí para evitar verse inmersos en una situación no deseada, a pesar de tener la licencia de pesca abonada. Unos cinco barcos con base en el puerto de Barbate, ya han anunciado que volverá a solicitar pescar en Marruecos, y han comenzado a abonar los 2.000 euros aproximadamente de las licencias, que serían válidas solo para el mes de enero de 2022. Ahí entrarían el canon y los derechos de pesca.

Para estos trayectos, que en muchas ocasiones superan las 16 horas de navegación, se precisa la duplicidad de cargos como el de patrón, ya que, al igual que ocurre con el sector del transporte de mercancía o pasajeros, se precisan dos conductores para un trayecto de larga distancia. Para este control, los barcos llevan instalado un equipo, que les costó unos 6.000 euros, y que controla la navegación de cada embarcación, además de la caja azul de la Unión Europea y la caja verde de la Junta de Andalucía, que les controla en el posicionamiento y las rutas.

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