Realmente resultaba una tarea ardua difícil para los presuntos narcotraficantes intentar disimular más de dos toneladas y media de hachís en una furgoneta de unos ocho metros de largo. Ciertamente el vehículo tenía muy buen fondo, pero más efectivo que el mero intento de los narcos por ocultar la droga ha resultado la eficacia del operativo policial que custodia el puesto fronterizo de Tarifa.

La aprehensión de hasta 2.531 kilogramos de hachís en el interior de una furgoneta marca Iveco modelo C-35730 a la que se le practicó un doble fondo en el habitáculo de carga ha supuesto el mayor golpe dado por los agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Servicio Cinológico y a la Sección Fiscal del Puerto de Tarifa en la frontera Schengen al narcotráfico.

La incautación de la droga se llevó a cabo durante la noche del pasado jueves cuando los agentes procedieron a la inspección del vehículo. El fondo del compartimento de carga no se correspondía con las dimensiones reales de la furgoneta. Algo que no pasó inadvertido para los agentes que descubrieron el compartimento secreto en el que se alojaban numerosas bolsas de plásticos y fardos de resina de hachís.

Los agentes procedieron entonces a la detención de M. M., de 35 años natural de Marruecos y residente en Murcia y a M. C., natural y residente en Marruecos, de 37 años, como supuestos autores de un delito contra la salud pública.

De los hechos fueron instruidas las correspondientes diligencias que, junto a los detenidos, droga y vehículo intervenido fueron puestos a disposición de la Autoridad judicial correspondiente.

Las dos toneladas y media de hachís interceptada en el puerto tarifeño es la mayor cantidad de droga incautada en una sola operación policial, para recordar algo parecido hay que remontarse al pasado año cuando a bordo y camuflada en habitáculos ocultos en dos autocaravanas, otros narcotraficantes pretendían introducir en la península una cantidad de droga que en cualquier caso no llegó a superar las dos toneladas y media ahora incautadas.