La Guardia Civil de Cádiz ha intervenido más de 2.700 cajetillas de tabaco de diferentes marcas comerciales y valoradas en más de 9.400 euros, cuando iban a ser distribuidas por distintos establecimientos de la provincia, los cuales se dedicarían a la venta ilegal de tabaco de contrabando.

Además de esta actuación, en los últimos días se han intervenido casi 10.000 cajetillas y levantado 15 actas por infracción a la Ley Orgánica 12/1995 de Represión del Contrabando a establecimientos de la provincia.

El servicio se enmarca dentro de la campaña de intensificación que la Guardia Civil de Cádiz realiza sobre la venta de tabaco de contrabando en la provincia, sobre todo del procedente de Gibraltar. En concreto, en los últimos días los agentes de la Patrulla Fiscal de El Puerto de Santa María han llevado a cabo numerosos decomisos de tabaco de este tipo, levantando 15 actas por infracción a la Ley Orgánica 12/1995.

El ultimo de los operativos realizados por estos agentes tuvo lugar anteayer por la noche, cuando los agentes de la Pafite de El Puerto tuvieron conocimiento de un individuo que se podría estar dedicando a abastecer a los negocios que se dedican a la venta de tabaco de contrabando.

Por tal motivo iniciaron un dispositivo de vigilancia y seguimiento sobre este individuo, culminando con la interceptación de un turismo de la marca Kia Modelo Sorento en el que trasladaba el género para reparto.

Los guardias civiles procedieron a dar el alto al vehículo y a identificar a su ocupante.

En un registro del vehículo encontraron más de 2.700 cajetillas de diferentes marcas comerciales, por lo que se incautaron del tabaco, el cual carecía de precinta fiscal, y procedieron a levantar un acta por infracción a la Ley Orgánica 12/1995 de Represión del Contrabando, que a la vista de la cantidad que portaba, será muy cercana al límite superior con la que la Ley castiga estas conductas.

Los establecimientos donde se ha intervenido este tipo de género ilegal se enfrentan, además de la aprehensión del tabaco, a la propuesta de sanción, que oscila desde los 400 a los 3.000 euros, más el pago del valor del género decomisado y los impuestos que generarían dichas cajetillas.Asimismo, el expediente incoado puede deparar el cierre del establecimiento por un periodo de 4 a 29 días, todo ello en función de la cantidad de tabaco de contrabando decomisada.