IU criticó ayer que la liquidación de los presupuestos municipales de 2012 pone de manifiesto que el pasado ejercicio económico del Ayuntamiento se cerró con un "déficit" de casi 4,9 millones de euros, una cifra que se reduce hasta los cerca de 3,3 millones si se incluyen las cuentas de las empresas públicas.

Su portavoz, Rafael Terán, aseguró que el Gobierno local "intenta que esa liquidación pase lo más desapercibida posible, porque nuevamente hay déficit y es necesario modificar o elaborar otro plan de ajuste para responder a los pagos para financiar un nuevo crédito a largo plazo de hasta diez millones de euros, algo que significará más recortes y más subidas de impuestos".

El concejal izquierdista argumentó que "IU ya demostró que los ejercicios 2007, 2008, 2009, 2010 y 2011 se liquidaron con un déficit medio anual de cinco millones de euros". "Esto supuso que el plan económico financiero 2009-2011 puesto en marcha por el equipo de Gobierno fracasara con las obvias consecuencias negativas que ha conllevado para la ciudad", manifestó.

Terán añadió que la alcaldesa, Irene García, y la concejala responsable de Hacienda, Inmaculada Muñoz, "siguen pretendiendo, en su deriva mentirosa, hacer ver a los sanluqueños que la situación económica del Ayuntamiento está mejorando y, por ello, en pleno mes de agosto y de tapadillo han presentado la liquidación de los presupuestos de 2012 con el mismo resultado que los años anteriores, con la excepción de unos ingresos extraordinarios de 25,8 millones de euros del crédito del plan de pago a proveedores".

Según el portavoz de IU, el "déficit" del último ejercicio revela que "el plan de ajuste de 2012 aprobado por el PSOE, CIS y el PP ha fracasado estrepitosamente, a pesar de haber supuesto subidas abusivas e injustas de los impuestos locales, recortes de servicios municipales y despidos de trabajadores, entre otras consecuencias". En este sentido, Terán aludió al "lamentable estado de suciedad de la ciudad".

De acuerdo con su versión, el Gobierno local "tendrá ahora que hacer un nuevo plan de ajuste o modificar el actual para conseguir que el Estado le conceda un nuevo crédito a largo plazo para pagar facturas y deudas con un máximo de diez millones de euros que el Ayuntamiento no ha podido pagar y que han sido devengadas en el último año". "Por tanto, no se trata de ninguna herencia recibida del PP, sino el resultado del desmadre económico del actual Gobierno PSOE-CIS", aseveró Terán.

IU insiste en reclamar "soluciones estructurales" que incluyan la adopción de "iniciativas de ahorro y austeridad efectivas" como la disolución de la Gerencia Municipal de Urbanismo.