Provincia de Cádiz

Indemnizada con 18.141 euros una embarazada que perdió a su bebé

  • El SAS admite que cuando la mujer se encontraba en la 39ª semana de gestación no hubo un control del estado fetal que pudo haber evitado el fallecimiento

El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha indemnizado con 18.141 euros a una vecina de Benalup que perdió a su bebé y que no fue sometida a un control cardiotocográfico que pudo haber evitado el fallecimiento del feto. La mujer, de 37 años de edad, acudió a urgencias del hospital de Puerto Real cuando se encontraba embarazada de 39 semanas y entonces, como admite el SAS, no fue realizada una valoración del estado fetal que era preceptiva.

El fallecimiento intraútero del feto fue consecuencia de un episodio de sufrimiento fetal en relación con un desprendimiento prematuro de la placenta normoinserta, señala la resolución del SAS que estima parcialmente la reclamación por responsabilidad patrimonial presentada por la mujer, a quien representó el abogado José Luis Ortiz Miranda, de la asociación El Defensor del Paciente.

La mujer explicó en su reclamación que estando embarazada de 36 semanas, acudió a urgencias porque tenía la tensión alta y que en las semanas siguientes volvió a ir, hasta tres días por semana por el mismo motivo. Allí, en el hospital, solicitó que le hiciesen la cesárea cuando le dijeron que el feto sufría con los picos de tensión.

El 26 de enero de 2009, la mujer se presentó de nuevo en el hospital. Estaba en la 39ª semana de gestación. Le había subido la tensión y sufría vómitos y diarreas. En su relato indica que la trataron de grastroenteritis, que pidió ver a otro médico y que la respuesta fue que volviese al día siguiente.

Por la noche rompió aguas y acudió de parto al hospital. "Cuando llego, me suben al paritorio y entre las carreras de una habitación para otra me dicen que el niño ha fallecido, que nació de parto natural", señala la mujer en su reclamación.

Un dictamen médico sobre lo sucedido encargado por el SAS explica que debió ser realizada una valoración cardiotocográfica del estado fetal al tratarse de una gestación de 39 semanas, "como se había efectuado en las asistencias anteriores".

"Aunque no puede asegurarse", añade ese informe, que esta valoración "hubiese modificado el curso de los acontecimientos y el resultado hubiese sido distinto, puesto que el fallecimiento del feto parece haberse producido por un desprendimiento placentario que, por definición, es una urgencia obstétrica que aparece de forma intempestiva y es imposible de prevenir, la hipertensión arterial es uno de los factores de riesgo y existe la posibilidad de que en el registro se hubiesen podido detectar alteraciones sospechosas de pérdida del bienestar fetal, con lo que se hubiese podido adoptar una conducta activa que habría evitado el fallecimiento del feto". "Por ello consideramos", indica el Servicio de Aseguramiento y Riesgos, "que para considerar correcta la asistencia en esta última consulta tendría que haberse realizado una nueva valoración del estado fetal".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios