La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, María José Sánchez Rubio, confirmó ayer como caso de violencia de género el crimen ocurrido la semana pasada en Chiclana, donde una mujer murió tras ser disparada con una escopeta por su marido, que posteriormente se quitó la vida con el mismo arma de fuego. Sin embargo, desde la Administración andaluza no se cataloga por el momento como caso de violencia de género el crimen ocurrido también la semana pasada en la urbanización de Sotogrande (San Roque), a la espera de que concluya la investigación policial que está en curso.

En rueda de prensa en Sevilla, la consejera de Igualdad dijo, en torno a este último suceso, que la Junta aguardará a que concluyan las averiguaciones de la Policía, al estar el suceso bajo secreto sumarial. En el mismo, un ciudadano belga de 51 años asesinó presuntamente a su pareja y a la hija de ambos para posteriormente fallecer por causas que aún no han sido aclaradas en los calabozos policiales.

"Son muchas mujeres, lo serían aunque solo fuese una", lamentó la consejera que, con todo, puso de manifiesto la utilidad del trabajo de prevención, información y protección llevado a cabo por la Junta a través del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM).

Según recordó Sánchez Rubio, de 136.000 consultas registradas en este organismo durante 2013, un total de 22.181 lo fueron por temas relacionados con la violencia de género. "Cómo se actuó exactamente con ellas nunca lo sabremos, pero probablemente con este trabajo se han evitado muchas muertes", expuso antes de añadir que a la Junta le preocupa "que no puedan servir las políticas puestas en marcha para proteger a esas mujeres".