El alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, pidió ayer al Ejecutivo de Pedro Sánchez que la ciudad "no se convierta en puerto permanente de acogida de inmigrantes", ante la llegada prevista del barco de la ONG Proactiva Open Arms con 87 personas rescatadas en aguas del Mediterráneo a bordo. En un comunicado, el regidor del PP aseguró que en la localidad "aceptan una vez más la llegada de estas personas a nuestra zona, pero no comparte algunas de las decisiones que el Gobierno está adoptando en esta materia".

Landaluce quiso dejar claro que "no se trata de ninguna cuestión personal, sino simplemente de que no se puede aceptar ninguna improvisación de las que lleva a cabo el Ejecutivo, a lo que se une la total falta de comunicación hacia las autoridades locales, lo que genera una situación de incertidumbre también entre la ciudadanía".

"Algeciras es una ciudad de más de 120.000 habitantes en la que conviven personas de 104 nacionalidades distintas, pero no quiero que se desequilibre y terminar padeciendo un problema social", explicó el alcalde, que aseguró que ante las últimas llegadas masivas de inmigrantes los servicios de asistencia se han visto desbordados, lo que desemboca en una "falta de atención a las personas necesitadas que residen en la ciudad". "Los algecireños tenemos los brazos abiertos y un gran corazón, pero también hemos de tener cabeza porque no tenemos bolsillo suficiente", sentenció el primer edil algecireño, que se ganó ayer las críticas de Podemos en la localidad. La formación morada lo acusa de mantener un "discurso xenófobo e ignorante" ante la llegada del Open Arms.