La barriada de José Antonio, una de las principales mecas de la droga de El Puerto, fue escenario ayer de un nuevo operativo policial. Numerosos efectivos de la Policía Nacional tomaron al mediodía al asalto el enclave para proceder a diversos registros domiciliarios en la calle Doctor Fleming "con autorización judicial", precisaron fuentes policiales.

Todo apunta a que la incursión policial tuvo éxito, habida cuenta que, al filo de la una y media de la tarde, al menos dos personas eran introducidas en calidad de detenidas en un zeta policial desplazado al efecto a la zona. El coche enfiló por la calle, donde supuestamente existen varios puntos de venta de droga, y tras entrar en su interior los arrestados, el conductor dio marcha atrás, instante que recoge la fotografía que ilustra esta información, para, a renglón seguido, abandonar la barriada.

Es la primera operación policial que se registra en esta conflictiva barriada en este año 2012 aunque lamentablemente no será la última.

Sin ir más lejos, en el año 2011 hubo al menos dos operativos importantes, que se desplegaron no sólo en José Antonio sino también en la barriada de Los Milagros, otra de las mecas de la droga, siendo arrestadas en total cerca de una docena de personas. La operación más llamativa tuvo lugar en mayo, cuando fueron arrestadas ocho personas en ambos enclaves que se preparaban según la Policía para abastecer de cocaína tanto a la Feria de Jerez como a la feria de la localidad, siendo desmantelados dos puntos de venta de droga en cada zona.

Tanto en José Antonio como en la barriada de Los Milagros están asentados desde hace años diversos clanes dedicados al tráfico de drogas. En el caso de José Antonio, la erradicación de la grave problemática es compleja debido a su configuración urbanística de ghetto, que convierte a la barriada en un lugar inaccesible y marginal: cuatro bloques de cuatro plantas de altura con 96 pisos en total, de los que en torno a la cuarta parte, según denuncian desde hace años los vecinos, son puntos de venta de droga. Su derribo, previsto desde hace años, aguarda el término de la promoción de viviendas de la Junta de Andalucía en la ermita de Santa Clara.