Provincia de Cádiz

Primero de mayo partido por dos

  • Dos manifestaciones distintas para reclamar con más o menos claridad los mismos derechos

  • Los líderes sindicales 'oficiales' critican la división

Según se cogiera ayer en Cádiz por Canalejas o por San Severiano, los ideales primeromayistas podrían quedar más o menos satisfechos. Quienes fueran al primer destino se encontrarían con la marcha oficial, la de Comisiones y UGT, la de IU y ayer también del PSOE, la de los de siempre pero con algunos cientos de acompañantes más que el año pasado. Quienes optaran por el segundo recorrido, se harían acompañar por los que tradicionalmente en las grandes convocatorias se han destacado por ser más 'beligerantes', más ruidosos y también quienes lanzan mensajes más directos: de Izquierda Anticapitalista al sindicato Ustea, la coordinadora de parados o representantes de Podemos. Otra diferencia, la edad. En la primera de las caminatas (unos 5.000 según la organización), muchos y de avanzada edad, incluso jubilados, pero también familias enteras, con abuelos, padres y nietos. En ella, históricos como Antonio Noria, Antonio Roldán, Manuel Cárdenas y los líderes sindicales provinciales. En la otra (unos 1.000), la juventud más inquieta de una provincia que, aquí sí coincidieron, no cambia su triste fotografía laboral.

De eso se trata en el 1 de mayo: de clamar por derechos perdidos, de reclamar a los distintos gobiernos cambios en sus políticas y, como se leía en la pancarta de la manifestación de la Plaza de España a la Subdelegación, tener claro que "no hay más excusas".

En esa marcha, los responsables de CCOO y UGT en la provincia, Lola Rodríguez y Francisco Andreu, lanzaban discursos parecidos, en la línea de los argumentos previamente reproducidos. "Salimos a la calle porque hace 130 años los trabajadores se organizaron para pedir las 8 horas de trabajo y hoy esa reivindicación sigue vigente. No hay excusas para que Cádiz siga siendo la provincia con más paro de Andalucía, España y Europa. Necesitamos que se rescate a las personas igual que se han rescatado autopistas y bancos", decía el líder ugetista. Su homóloga en Comisiones añadía que "estas reivindicaciones, lejos de servir para alejarnos de la clase trabajadora, tienen que servir para unirnos. Tienen que escuchar los gobiernos central y autonómico que ya no tienen más tiempo de espera la creación de empleo de calidad, retomar el equilibrio en la negociación colectiva, derogar la reforma laboral. Hoy es un día reivindicativo, donde la clase trabajadora tiene que salir a la calle para defender sus derechos. Hasta ahora no han podido con nosotros y difícilmente van a poder".

La representación política también quiso dejar su impronta ayer. Desde IU, su coordinador provincial, Fernando Macías, afirmaba que "hay que reivindicar hoy por esa pobreza laboral que cada día crece en esta provincia. Cádiz está viviendo una situación trampa, en la que los distintos gobiernos le están dando la espalda. Este 1 de mayo tiene que servir para que el pueblo de Cádiz lance su grito y que llegue al Gobierno para crear empleo".

Y Araceli Maese, secretaria de Organización del PSOE provincial, defendía la presencia de su partido ayer: "El PSOE siempre ha luchado por los derechos de los trabajadores, que estemos hoy aquí tiene más sentido que nunca. Allí donde gobernamos siempre tenemos iniciativas para generar empleo y con el PP siempre sale perdiendo la clase trabajadora".

Pero en el ambiente estaba presente la división, la otra marcha. Unos preguntaban a otros "cuánta gente hay", o "quién ha estado". Los líderes de CCOO y UGT no ocultaban su contrariedad. Francisco Andreu lo decía a las claras: "Esto siempre divide. Con nuestro lema caben todos, desempleados y trabajadores, aquí cabría cualquier reivindicación de cualquier colectivo con su pancarta, pero no puedo obligar a nadie a que venga. Me hubiera gustado que la clase trabajadora se hubiera manifestado como hace 130 años, de la mano y juntos". Y Lola Rodríguez, en la misma línea: "Con la clase trabajadora unida difícilmente pueden vencernos. Esta es una marcha que hacemos desde hace años que tiene que servir para unir a los trabajadores, a la que están invitados todos los que tengan las mismas inquietudes y el empleo, la protección social y los derechos son cosas que nos unen".

Desde el otro lado de la ciudad, en la manifestación 'menos oficial', el parlamentario andaluz de Podemos, Jesús Rodríguez, aseguraba que la coincidencia de dos convocatorias es "parte de la tónica de los últimos años que muestra diferentes modos de afrontar la crisis. Pero lo importante no es hacer sangre de esas diferencias, sino reivindicar y luchar porque los de arriba no se van a dejar arrebatar sus privilegios con pasividad".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios