Dos carreteras de la provincia han entrado como prioritarias en el plan de infraestructuras del nuevo gobierno de la Junta. Se trata de obras que se recogían en el plan de Infraestructuras 2016-2020, conocido como PISTA, y que, a falta de un año para su conclusión, sólo había conseguido una ejecución,del 44%.

Dentro del nuevo plan, rebautizado como PITMA, que nace como más realista y que se mezcla con el anterior, se mencionan dos carreteras de Cádiz, entre más de una veintena de infraestructuras, para reactivar su ejecución. Ambas se encontraban estancadas en fases de tramitación o redacción. Son el desdoble de la carretera entre Rota y Chipiona y la mejora del firme y ampliación de algunos tramos en la carretera entre Arcos y Antequera, dos antiguas reivindicaciones de la provincia, si bien en el caso de la Arcos-Antequera la demanda es su desdoble completo, que figuraba dentro del programa electoral del PP andaluz.

En el caso de la Rota-Chipiona su aparición en los planes de la Junta se remonta al año 2004, cuando se incluyó dentro e un plan que, en aquella ocasión, se llamó Más Cerca. Esta vez parece que la ejecución es inminente y así se ha vendido, tras pasar por el Consejo de Gobierno, durante la campaña electoral por las candidatas del PP, sin demasiado éxito, ya que ni la de Rota ni la de Chipiona han tenido buenos resultados.

La programación del PITMA está, en cualquier caso, muy lejos de las ambiciosas pretensiones que el PP vendió para la provincia, programando hasta un medio centenar de obras para las carreteras, si bien es cierto que para toda la legislatura. La consejera del ramo, Marifrán Carazo, ha avisado que, al menos en el inicio del plan, se dará preferencia a la conservación de carreteras, para lo que se han destinado 88 millones, cuya inversión se había reducido a la mitad en los últimos diez años. Con esto se quiere decir, además, que no habrá grandes programaciones En inversión de urgencia, de momento, la parte del león se la han llevado las provincias de Almería y de Sevilla.

Esto no quiere decir que no se trabaje en otras carreteras. Por ejemplo, a la muy demandada carretera de El Tesorillo ya se le ha hecho el estudio de inundabilidad y también se le ha dado prioridad al refuerzo del firme entre Castellar y Sotogrande. Además, en la que será la nueva carretera entre Medina y Paterna, una localidad con unas pésimas conexiones, ya se han iniciado los trabajos y se espera que sea una de las primeras que se finalice en el nuevo plan de la Junta.