En plena Primera Guerra Mundial, Marie Curie tomó clases de mecánica y se sentó al volante de una vieja furgoneta para salvar la vida de soldados en el frente. Lo cuenta Carlos Prego Meleiro, en el libro ‘Científicas que conducían ambulancias en la guerra (y otras mujeres en la ciencia)’. Fue un caso muy excepcional que no tuvo continuidad, y pese a que en España la primera mujer en ponerse al volante de una ambulancia fue la asturiana Araceli Estrada, hace más de 40 años, el sector sigue siendo un mundo muy masculinizado donde las féminas tienen escasa presencia.

“Pero eso está cambiando”, dice Juani Utrera, Presidenta de la Cooperativa Ambulancias Barbate. En España, las mujeres TES (Técnico en Emergencias Sanitarias) apenas llegaban al 1% en los años 80. Ahora ya se supera el 20%, aunque la cifra varía dependiendo de cada comunidad. “Notamos mucho el crecimiento de la presencia de la mujer en el alumnado que recibimos de prácticas, donde son ya casi el 50% de hombres y de mujeres”, asegura Utrera.

Visita de la directora del IAM a Ambulancias Barbate

La Cooperativa Ambulancias Barbate es un ejemplo de la lucha por la igualdad. La principal señal es que la propia presidenta de la cooperativa es una mujer, así como su gerente, algo poco habitual en las cooperativas, y más extraño aún en el transporte sanitario que está copado por los hombres.

Por ello, la experiencia de esta empresa ha llamado la atención de la directora del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM), Laura Fernández Rubio , que ha visitado las instalaciones de la empresa en el polígono Tres Caminos de Puerto Real, junto a la asesora del Instituto Andaluz de la Mujer en Cádiz, Celia Mañueco.

“Estamos encantadas de estar visitando una cooperativa con una labor social tan importante y tan comprometida con la igualdad”, dijo Fernández Rubio en la vista. “Uno de los objetivos del IAM es impulsar y dar visibilidad a empresas como esta, una cooperativa con una economía social tan importante, en la que hay mujeres que toman decisiones”. La directora del IAM también celebró el Plan de Igualdad de la cooperativa y la apuesta decidida por fomentar la conciliación.

Durante la visita también estuvo presente Carolina Casanova, flamante presidenta provincia de la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas de Trabajo (FAECTA), que agradeció a las responsables del IAM la visibilización de las cooperativas de Cádiz. “Esta es una de las cooperativas más grandes de toda la provincia de Cádiz y hay que remarcar que está presidida por una mujer”, destacó Casanova. También manifestó que uno de los principales focos de FAECTA se pone “en la igualdad entre hombres y mujeres y, por supuesto, en la conciliación”.

Otra mujer, Elena Aznar, coordinadora de AMECOOP (Asociación de Mujeres Empresarias Cooperativistas de Andalucía) en la provincia de Cádiz, abundó también en el objetivo de visibilizar las empresas cooperativas, participadas mayoritariamente por mujeres. “Tenemos la suerte de contar con una cooperativa presidida por una mujer decidida y trabajadora, en un mundo muy masculinizado. Para seguir avanzando tenemos que seguir solicitando el respaldo de las administraciones”, dijo.

Juani Torres, Técnico de Emergencias Sanitarias, durante la explicación de su trabajo

Durante la visita, la directora del IAM, así como el resto de representes, atendieron a las explicaciones de Juani Torres, una de las Técnicos de Emergencias Sanitarias de la cooperativa, que les explicó el funcionamiento de una ambulancia de urgencias, así como el material con el que trabaja. También explicó su propia experiencia personal y su trabajo diario. “Todavía hay quien se sorprende al ver a una mujer al frente de una ambulancia, pero afortunadamente cada vez es más habitual”, dijo.

Ambulancias Barbate, fue constituida como sociedad cooperativa el día 6 de diciembre de 1983, dedicada al transporte sanitario por carreteras. Actualmente la plantilla está formada por unas 130 personas, la mayoría de ellos socios cooperativitas. Actualmente, solo 13 son mujeres, aunque el número de trabajadoras va creciendo al mismo ritmo al que la mujer se va incorporando al sector.