El acceso norte a Algeciras se cobró ayer su tercer accidente de tráfico en 22 días, afortunadamente sin que hubiera que lamentar desgracias personales a pesar de que un coche quedó volcado en la autovía. En esta ocasión no se produjo en el túnel en sí, pero sí tuvo que ver con cómo está configurado ese acceso a la ciudad campogibraltareña.

Según las conclusiones a las que ha llegado la Guardia Civil, la hipótesis más probable de lo acontecido es que el principal vehículo involucrado en el accidente, un Fiat Punto blanco, acababa de salir del túnel en sentido Málaga cuando, en un momento dado, tocó o pisó el bordillo de separación con el carril contrario, con el que empieza el pequeño murete que separa ambos sentidos durante unos centenares de metros. Eso hizo que el automóvil volcara y además, durante el percance, también colisionó con un camión.

La conductora, una chica de 26 años, fue trasladada al hospital Punta de Europa, sin lesiones de gravedad: un esguince cervical, una contusión leve de codo y crisis de ansiedad.

Todo ocurrió a las dos menos cuarto de la tarde y el vehículo quedó invertido en el carril por el que se sale del túnel, en el kilómetro 109 de la A-7, a la altura del hostal Blumen por un lado y la Venta Peña por el otro. Es decir, una situación crítica para el tráfico y encima en una hora punta, lo que hizo que se registraran retenciones y colapsos.

La Guardia Civil organizó todo el operativo para canalizar los automóviles, acotando la zona del coche siniestrado hasta que pudiera ser retirado y dando paso alternativo a los vehículos. Así se mantuvo la situación hasta las tres y cuarto de la tarde.