Provincia de Cádiz

El desafío de Rodríguez de Castro a De Mier

  • Entre otras cosas lo llamó "sinvergüenza". El socialista contesta que "me trae al pairo lo que diga este señor"

El ex delegado de la Zona Franca de Cádiz Manuel Rodríguez de Castro, que se enfrenta a diez años de prisión en este juicio, ha demostrado que sabe elegir bien los momentos para hablar a los medios de comunicación y soltar algunas perlas. Lo hizo el día que prestaba él declaración y que también le podía haber tocado a Miguel Osuna, y lo hizo ayer cuando le tocaba a José de Mier, con el que subió el tono de su discurso.

Así, ayer lo calificó como "uno de los mayores sinvergüenzas de la política gaditana", al tiempo que advirtió de que le denunciaría si considera que dentro de la Sala comete "un posible delito de falso testimonio".

Esta actitud desafiante tuvo una imagen y es que cuando se produjo un receso en la sesión de ayer, justo antes de la declaración del socialista, Rodríguez de Castro se plantó a escasos dos metros de José de Mier y permaneció mirándole fijamente durante más de un minuto.

Desde que es "un político viejo con mucho colmillo" a que De Mier "está asociado a algunos de los hechos más dudosos de la ética política gaditana" para finalizar con que "ha hecho recalificaciones masivas en la costa gaditana que desde luego no cumplen con lo que todos quisiéramos que fueran nuestras costas". Pero la andanada no quedó ahí sino que también le atribuye algo que en su opinión "podría ser eventualmente constitutivo de un delito en tanto en cuanto pudiera haber organizado una trama para que Rilco fracasase".

José de Mier, una vez que concluyó su declaración en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial dijo de manera muy clara que "lo que diga Rodríguez de Castro me la trae al pairo. No llega ni a molestame. No tiene la más mínima calidad humana para poder molestarme".

El ex delegado del Estado explicó a los periodistas una vez que declaró que "parece que los abogados de las defensas están buscando más la forma que el fondo y no tienen muchas ganas de conocer la verdad". En este sentido, dijo que todo lo que se hizo una vez que llegó a la Zona Franca "fue un proceso que se hizo con muy buena voluntad por parte nuestra para intentar aclarar todo lo posible pero las dudas y los problemas eran tan gordos que nos han llevado a esta situación". De Mier quiso dejar muy claro que "no hubo ninguna voluntad de influir en el informe".

También relató que cuando le entregó el informe del Ministerio de Hacienda sobre Rilco y la Zona Franca a la alcaldesa, Teófila Martínez, esta dijo "esto no lo quiero yo", pero se lo dejó.

Por último recalcó que el proceso "se ha hecho con una prudencia y elegancia extraordinaria que no se corresponde con lo que quieren hacer ver ahora".

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