Este texto es consecuencia de la inexactitud en las afirmaciones vertidas por el alcalde de Villamartín, Juan Luis Morales Gallardo, a raíz de la reciente noticia sobre la consecución del libro Real Ejecutoria del Marqués de los Álamos del Guadalete.

El documento recoge un pleito entre los primeros miembros de dicha casa nobiliaria y la ciudad de Sevilla por la posesión de Villamartín, pleito que abarcó las primeras décadas del siglo XVIII. De partida, son también erróneas las afirmaciones sobre que se basara en otro libro anterior, pero sobre todo hay que destacar la inoperancia del Ayuntamiento de Villamartín y de su alcalde para recuperar este libro.

Sabedores de su existencia, el señor alcalde y su grupo municipal no ha iniciado ninguna acción conocida a fin de su devolución al patrimonio villamartinense. Fue con motivo de una investigación histórica del autor del presente artículo como pudimos demostrar su pertenencia al fondo documental del municipio de Villamartín, donde fue depositado el 21 de marzo de 1732, según se atestigua en la sesión plenaria recogida en las actas capitulares de aquel año, y en la década de 1960 trasladado irregularmente por un trabajador municipal.

El manuscrito fue descrito en 1962 por los hermanos José y Jesús de las Cuevas en su monografía sobre Villamartín. Ahí especificaban claramente que se encontraba en el Ayuntamiento, pero en 1968 fue entregado por la viuda de la persona que lo sustrajo al párroco de Villamartín, quien lo mantuvo hasta fechas recientes.

Siendo conocida la situación por la comunidad investigadora de la localidad y ante la inoperancia y apatía tanto de la Concejalía de Cultura como del alcalde hacia este tema, un pequeño número de investigadores dirigimos un escrito al obispo de Asidonia-Jerez con fecha 28 de septiembre de 2019, exponiéndole la historia del manuscrito y su irregular ubicación en la parroquia de Villamartín. Acusado recibo de su recepción, procedimos a dirigirnos al actual párroco y al alcalde de Villamartín, informándoles del caso igualmente y de nuestras actuaciones, sin recibir respuesta alguna por parte del Ayuntamiento.

Fue la falta de contestación lo que me hizo de nuevo dirigirme el 28 de octubre de 2019, al Ayuntamiento de Villamartín sobre este tema. Se me respondió que el manuscrito había tenido entrada en las dependencias del Ayuntamiento, pero estaba pendiente de valorar su interés histórico. Al comentarles mi deseo de consultarlo, comenzaron las negativas.

Al insistirles que como historiador y experto en archivística podía orientarles, ya que ningún técnico cualificado había accedido al mismo ni nadie lo había visto, comenzaron las reiteradas negativas a mostrar el documento. Excusábanse en un supuesto estado de conservación que nadie había podido determinar y rozando con ello la vulneración del acceso a la documentación pública.

Por este motivo debí interponer el consiguiente escrito de queja ante la Delegación Territorial de Cultura de la Junta de Andalucía en Cádiz y ante la Dirección General de Patrimonio Histórico y Documental, informándoles del tema y de la posible vulneración de los derechos de acceso. Solicitaba la inspección por técnicos cualificados de la Junta de Andalucía debido a la inexistencia de tal informe pericial por parte del Ayuntamiento de Villamartín.

Interpelados por esta cuestión en la sesión plenaria municipal del 28 de noviembre de 2019 sobre la ubicación y estado de conservación del manuscrito, el Alcalde respondió que estaba en la caja fuerte del Ayuntamiento, en aparente buen estado de conservación. Cabe destacar que el manuscrito, con dos hojas miniadas y encuadernado en piel, necesita unas medidas singulares de conservación.

El alcalde de Villamartín, ajeno a la profesión archivística y a conocimientos de conservación documental, sin haber consultado con personal cualificado alguno, decidió de forma unilateral cómo debía conservarse el documento.

Ante esta contradicción, ya que chocaba con sus afirmaciones del estado de conservación, y sin haber podido acceder al mismo, decido interponer sendas reclamaciones, con fecha 2 de diciembre de 2019, ante los mismos organismos, añadiendo además al Consejo de Transparencia y Protección de Datos de Andalucía, por la posible vulneración del derecho de acceso a la documentación pública.

El 16 de diciembre de 2019, la Delegación Territorial de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía en Cádiz, toma cartas en el asunto, abriendo las pertinentes diligencias informativas al Ayuntamiento de Villamartín. Estas tenían la finalidad de dilucidar las actuaciones realizadas con el mencionado manuscrito, solicitando los informes pertinentes en los que se basaba la negativa de acceso al mismo.

Igualmente se procedió a valorar la realización de una inspección por parte de personal cualificado, siendo la primera vez que se pudo acceder al documento por personal técnico. Esto ha desembocado finalmente en la entrega del manuscrito al Archivo Provincial.

Ha sido un año de camino en el que es de alabar y destacar la actuación tanto del Obispado y del párroco de Villamartín como de los técnicos y responsables de la Delegación Territorial de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía en Cádiz, que inmediatamente comprendieron el interés que dicho manuscrito tiene no sólo para la historia de Villamartín, sino también para el de otras localidades como Lebrija, Las Cabezas de San Juan, o incluso a nivel nacional.

Un año en el que he tenido que enfrentarme a la apatía, inoperancia y caciquil actitud de un alcalde que no ha hecho absolutamente nada para su recuperación y que se ha visto obligado por las diligencias abiertas a depositarlo temporalmente en el Archivo Histórico Provincial.Sea en honor a la verdad.