Aunque las calles y plazas del casco urbano de El Puerto de Santa María están urbanizados, dotadas de alumbrado y saneamiento, asfaltadas, adoquinadas y con acerado, se impone la tendencia a levantarlas nuevamente para reformarlas y facilitar la movilidad, en especial turística, para que los visitantes puedan trasladarse incluso en grandes grupos con las mínimas dificultades de un lugar a otro. Se trata de transformar la localidad en una "isla ambiental global", nombre técnico que reciben las zonas donde se han ejecutado o está previsto realizar intervenciones urbanísticas de peatonalización o semipeatonalización.

Hasta ahora, una parte importante de dichas intervenciones se han realizado en el centro histórico de la ciudad, dentro de lo que fueron en su momento las distintas fases del proyecto de Urbanismo Comercial.

El nuevo proyecto 'Ciudad Amable' consiste en extender el modelo aplicado en el centro al entorno de la Plaza del Castillo y la Plaza del Polvorista, así como a la calle Los Moros, para crear un itinerario más peatonal que el actual (una ruta) que enlace ambas zonas (Campo de Guía y calle Misericordia), las cuales, según los redactores del proyecto, se encuentran desconectadas entre sí. 

El proyecto se aprobó en un pleno extraordinario el 30 de septiembre, por unanimidad de todos los concejales que estuvieron en la sesión. Está financiado con fondos de la iniciativa ITI Cádiz, y se elaboró en el anterior mandato municipal. La inversión para habilitar esta ruta peatonal entre la zona sur y la zona centro de El Puerto, asciende a 1,2 millones de euros, para regenerar el espacio urbano.

Dentro de esta estrategia de peatonalizar y semipeatonalizar las calles, la propuesta contempla intervenir en un entramado de 10 vías, "actualmente con deficiencias, que conectan zonas de interés turístico, cultural, comercial y de servicios con otras adyacentes".

Las nuevas vías en las que se intervendrá para crear el también llamado "pasillo amable" serán la calle Misericordia (tramo entre las calles Palacios y Santo Domingo), plaza de Juan de la Cosa (entre las calles Santo Domingo y La Palma); calle La Palma (entre Sol y plaza Juan de la Cosa), calle Sol, Plaza del Polvorista, calle Aurora (desde El Polvorista a la calle Los Moros), calle Aguado, Los Moros (entre Avenida de la Bajamar y Comedias), calle Ximenez Sandoval (entre Los Moros y Plaza del Polvorista), y la calle Comedias (entre Los Moros y Fernán Caballero).

Estas calles y plazas suman una considerable superficie, aunque en la mayoría de ellas se actuará de forma parcial, sumando entre todas 4.812 metros cuadrados. En cada tramo, el proyecto contempla una serie de actuaciones específicas "que se estiman necesarias para la finalidad de lograr la cohesión y el correcto funcionamiento de toda la isla ambiental". 

En términos generales, y en distinta medida, se ampliarán las aceras, se eliminará gran parte de los aparcamientos  (en las calles Ximénez Sandoval, Los Moros o Aurora) dejando zonas de carga y descarga; en algunas vías se pondrá al mismo nivel la calzada y las aceras (La Palma y Misericordia), se ampliarán alguna de las aceras actuales reduciendo los estacionamientos (Plaza de Juan de la Cosa o acera del antiguo hotel Santa María); y se cambiará el alumbrado público en gran parte de este "itinerario amable".

El objetivo es enlazar la zona sur de la ciudad (Plaza del Polvorista y Campo de Guía) con la zona centro, ya peatonalizada (calle Misericordia).

Una de las novedades más destacadas será en el entorno de la plaza del Polvorista, donde se elevarán zonas parciales de la calzada "para potenciar conexiones y edificios", elevándola hasta el mismo nivel que la plaza, en las esquinas, por ejemplo en la de Correos, frente al Teatro Municipal o entre el antiguo Ayuntamiento y la propia plaza, mejorando el tránsito los peatones y obligando a los automóviles a reducir la velocidad.

En la plaza de las Bodegas, también como novedad, tras eliminar el estacionamiento en la calle Los Moros, se habilitará un aparcamiento en batería abierto a dicha calle. En el tramo anexo a la Plaza del Castillo, entre las calles Santo Domingo y Federico Rubio, se aspira al enlace directo de la zona de tránsito rodado, y a la fusión con dicha plaza. Este ensanchamiento adoquinado "cuenta con comercios que mejorarán su actividad", los cuales, una vez completada la intervención "podrán volcarse más a la vía, dinamizando el entorno". Para ello, el proyecto Pasillo Amable contempla ampliar la zona peatonal y ponerlas al mismo nivel de la zona de paso de vehículos, al tiempo que se reorganizará la vegetación (los grandes árboles existentes), "actualmente mal estudiada". Los aparcamientos que hay debajo de dichos árboles se reducirán a "carga y descarga y motos".   

En todo el ámbito de actuación de 'Ciudad Amable' el tráfico rodado se mantendrá en líneas generales  como está actualmente, por lo que en principio no se recoge la peatonalización completa de ninguna de las calles ni plazas incluidas en el proyecto.

Según confirma la memoria del proyecto, Ciudad Amable "pone en valor el patrimonio, creando una ruta que enlaza bodegas, Castillo de San Marcos, edificios municipales, y edificios de interés turístico con lo que pretende acercar la ciudad al viandante, haciendo que su recorrido sea agradable, accesible, seguro y pueda ser un fin en sí mismo, no un mero recorrido de paso por un entorno hostil para el peatón".

Con ello se busca también "desestacionalizar la oferta turística del municipio y que no se reduzca a un turismo de veraneo, ya que la ciudad cuenta con gran riqueza patrimonial, cultural, histórica y natural". 

Desde otro punto de vista, "mejorará el medioambiente, incluyendo nueva vegetación y reordenando el escaso arbolado existente, cuyos alcorques son inadecuados, de modo que sus raíces han levantado el pavimento".

También entiende el proyecto que se potenciará la conexión de la ciudad con el río Guadalete, pese a que la calle Aguado, conexión directa entre el muelle de los catamaranes y la Plaza del Polvorista, no se va a tocar, al menos por ahora, "dado que se prevén demoliciones en edificios de esta vía". En esta calle peatonal se plantea únicamente "la introducción de arbolado que haga más atractiva su imagen".

Al introducir nuevas variedades de arbolado, se creará "un itinerario verde que, unido a la reducción de vehículos en la zona, favorecerá la aparición de distintas especies de aves, mitigando los efectos del cambio climático al disminuir la contaminación y las islas de calor, regular el aparcamiento y disminuir el nivel de tráfico motorizado, además del uso de pavimentos anticontaminantes".

Este itinerario dará prioridad peatonal y a bicicletas, y "reducirá la factura energética municipal, apostando por el alumbrado eficiente y optimizando el existente", produciéndose a la vez "una mejora en calidad de espacios libres y de la accesibilidad en todo el ámbito, con actuaciones que pueden hacer más atractiva la ciudad para primera residencia y captar a la juventud, que la ha ido despoblando trasladándose a urbanizaciones periféricas".

En cuanto al plazo de ejecución de la intervención, se prevé que se extienda durante 9 meses, con independencia de que se realizará por fases, solapando aperturas de calles y "evitando levantar todo simultáneamente para minimizar el impacto en el uso del entorno", según concluye el dossier técnico del proyecto.