La Junta Local de Seguridad se reunió ayer en el Ayuntamiento para abordar los dispositivos para la próxima edición de la motorada, que se celebrará del 1 al 3 de mayo, y de la Feria de Primavera, que tendrá lugar pocos días después, del 7 al 11 del mismo mes.

Como principal novedad el subdelegado del Gobierno en la provincia, Sebastián Saucedo, y el comisario provincial de Cádiz, José María Deira, anunciaron la llegada de 50 agentes más de la Policía Nacional para reforzar la seguridad ciudadana, con lo que en total serán 260 los agentes de este cuerpo que estarán esos días en El Puerto. Se espera también poder contar con la plantilla al completo de la Policía Local, para lo que el concejal del área, Carlos Montero, confió en que se alcanzara un acuerdo con los sindicatos. En cuanto a la Guardia Civil, será la encargada de controlar los accesos a la ciudad desde todos los puntos, con presencia tanto en la rotonda de los toros como en Valdelagrana, en la carretera de Rota y en la avenida de Sanlúcar.

Con la mayor presencia de efectivos tanto en los accesos como en el casco urbano el concejal de Policía Local quiso explicar que "hay que hacer ver a los que vengan que esto ya no es la ciudad sin ley y que hemos puesto medidas para evitar los desmadres".

También quiso hacer Montero un llamamiento tanto a los portuenses como a los visitantes para que observen medidas de seguridad como la no ocupación de la mediana de la antigua Nacional IV, sobre todo a la altura del centro comercial de Bahía Mar, para lo que también se adoptarán las medidas oportunas por la peligrosidad que esto supone.

El centro de la ciudad permanecerá cerrado al tráfico con los límites de la rotonda de Pozos Dulces y las calles Larga y Valdés, aunque como novedad este año no estará abierta al tráfico la calle Espíritu Santo porque estará de obras en esa fecha. Por tanto, los vehículos que accedan hasta el aparcamiento de Pozos Dulces y no puedan entrar por estar completo, tendrán que regresar sobre sus pasos. Otros aparcamientos que se habilitarán serán los habituales del Monasterio de la Victoria y la bolsa habilitada en la antigua lonja pesquera, que ya el año pasado se utilizó pero que será ampliada. Por lo que respecta a Valdelagrana, otro de los puntos conflictivos en cada edición, la avenida de La Paz volverá a estar abierta al tráfico después de que el pasado año permaneciera cerrada por obras. No obstante, se colocarán vallas y bloques de hormigón para evitar que el trazado sea recto y obligar a los moteros a aminorar la velocidad.

Por lo que respecta a la Feria de Primavera, el edil Carlos Montero anunciará que será más estricto con el control de la venta ambulante, que estará concentrada en un único punto del recinto. También se extremará la vigilancia en la zona de atracciones, con especial control sobre la documentación y seguros de los feriantes. También como novedad este año, y con el fin de reducir los gastos de protocolo, los actos inaugurales de la Feria se concentrarán en la noche del miércoles, durante la Velada, con el encendido del alumbrado extraordinario y la izada de banderas en el recinto de Las Banderas.

También advirtió Montero que el Ayuntamiento será muy estricto con el cumplimiento de las ordenanzas de la Feria.