Pese a la incertidumbre del contexto internacional y el incremento de los precios, que ha limitado el poder adquisitivo de los españoles, los hoteles del Novo Sancti Petri se muestran optimistas respecto a la temporada estival. A estas alturas mantienen porcentajes de reserva para los meses de julio y agosto similares a los del 2021, cuando batieron récords históricos de ocupación en sus establecimientos. Los más optimistas incluso plantean que se pueden superar esas cifras, no solo durante el verano, sino durante el curso completo, mejorando las cifras del 2019, año previo a la pandemia.

“Somos optimistas porque el ritmo de reservas en las últimas semanas ha sido muy alto y todo hace presagiar que vamos a estar ante un verano histórico”, explica el director del hotel Royal Hideaway, Ignacio Martín. El establecimiento del Novo Sancti Petri ya tiene un 80% de sus habitaciones reservadas para el mes de julio y más de un 70% para el mes de agosto. Si todo sigue evolucionando así, con toda probabilidad rozarán el lleno un verano más.

En el hotel Barrosa Palace, también en el Novo, las reservas alcanzan el 83,9% para el mes de julio y el 84,75% para el mes de agosto. Su director, Jaime Real, también es optimista: “La primera decena de agosto está casi al completo. Teniendo en cuenta que el turismo nacional reserva a última hora, nuestras expectativas son muy positivas y esperamos los meses de julio y agosto llenar el hotel como ocurrió el año pasado y los anteriores a la pandemia”.

El Barrosa Park, uno de los establecimientos de la cadena Hipotels.

La inflación y la incertidumbre por el contexto internacional vuelven a ser los principales obstáculos. Hay dudas sobre cómo pueden evolucionar las reservas del turista nacional, que ha perdido nivel adquisitivo y vivirá este verano las vacaciones más caras que se recuerdan, pero hay muchas ganas de disfrutar tras la pandemia y la costa de Cádiz cuenta con un perfil de cliente muy fiel. En el hotel Royal Hideaway, hasta un 75% de los clientes repite alguna vez.

Sobre la mesa está la duda de si algunos clientes nacionales que el año pasado eligieron la costa Cádiz tras descartar la posibilidad de viajar al extranjero repetirán o no este año, ya sin restricciones y con las fronteras abiertas. Sin embargo, el sector turístico confía en que vuelvan a la costa gaditana en general y al Novo Sancti Petri en particular, como muchos han confirmado que lo volverán a hacer.

Todo ello a pesar de las dudas que generó la guerra de Ucrania hace unos meses, cuando abrieron los hoteles y empezaron a preparar los establecimientos en la temporada baja. “A medida que avanza la temporada, las previsiones van siendo más optimistas. Están reservando a buen ritmo, tanto nacionales como internacionales, y estamos muy contentos en ese sentido”, explica el director del Barrosa Palace. “Estamos muy confiados en que se alcanzarán los niveles de ocupación del verano anterior, con la diferencia de que este año también volverán a visitarnos el turismo internacional”, añade.

Ignacio Martín vincula el éxito al contexto económico y a la inflación, aunque confía en que el sector pueda batir el récord no sólo durante la temporada estival, que el año pasado fue la mejor de la historia, sino los registros de 2019, los previos a la pandemia.