La campaña de recogida de avales de cara al proceso de primarias abierto recientemente para elegir al relevo de José Antonio Griñán en la candidatura del PSOE a la Junta de Andalucía ha arrancado en la provincia de Cádiz con sorpresas sonadas. La más llamativa hasta la fecha es la decisión del alcalde de Barbate, Rafael Quirós, y de la delegada territorial de Innovación y secretaria local de Algeciras, Angelines Ortiz, de firmar a favor de la candidatura de Susana Díaz. La medida supone un golpe de efecto por parte de los griñanistas-susanistas y, también, una primera señal de que el pizarrismo o el clan de Alcalá, es decir, la corriente que durante décadas ha mandado en este partido en la provincia, ha empezado a desangrarse.

El sector que dirige hoy el PSOE tanto en Andalucía como en la provincia de Cádiz parece haberse tomado este proceso interno como una oportunidad única para mostrar todo su poderío. Por ello, y haciendo uso de todos los instrumentos del aparato del partido, los griñanistas reconvertidos ahora en susanistas buscan recopilar el mayor número de avales posibles. Sus previsiones son ambiciosas, ya que de un censo total que ronda los 4.700 militantes aspiran a captar unas 3.000 firmas.

El proceso ha arrancado además con un desconcierto mayúsculo de la corriente crítica que, por un lado, no termina de ver claro que Luis Planas sea la mejor alternativa y, por otro, está viendo cómo algunas de sus piezas más valiosas se están cambiando de bando.

En este último grupo se encuadra por ejemplo, el alcalde de Barbate, Rafael Quirós, quien fuera hace apenas un año el candidato pizarrista a la secretaría general del PSOE de Cádiz y que fue derrotado por 46 votos de diferencia por Irene García. Quirós confirmaba ayer su disposición a firmar el aval de Susana Díaz en el marco de una decisión adoptada recientemente por la agrupación socialista barbateña que dirige José Manuel Miranda. "En Barbate creemos que Susana es la mejor candidata de entre los que se han presentado. A Planas no lo conocemos y al alcalde de Jun, desde el mayor de los respetos, no lo vemos en este cometido", reflexionaba ayer en voz alta el regidor de Barbate quien, además, destacaba "la apuesta por la integración que estamos apreciando en la dirección del partido".

Otro antiguo cargo pizarrista que también respaldará la candidatura de Susana Díaz será la delegada territorial de Innovación y secretaria general del PSOE de Algeciras, Angelines Ortiz, que hace poco más de un año fue el único cargo no afín a Griñán que se mantuvo al frente de una de las áreas de gobierno de la Junta en la provincia. Pero aún puede haber más sorpresas, ya que el sector oficialista del partido no descarta que este paso lo terminen dando también otros dirigentes del partido como, por ejemplo, la alcaldesa de La Línea, Gemma Araujo, o la parlamentaria andaluza Rocío Arrabal, aunque ambos extremos no habían quedado ayer confirmados. La primera de ellas se ha limitado a afirmar que no se pronunciará en público sobre la opción que finalmente adopte.

En el horizonte de estas maniobras parece estar la pretensión de los susanistas de dejar al resto de candidatos a las primarias sin avales en Andalucía y, de esta manera, evitar que haya votaciones el próximo 29 de julio en las diferentes agrupaciones locales. Si esto se produce, la consejera de la Presidencia sería proclamada así por aclamación candidata socialista a la Presidencia de la Junta de Andalucía.

¿Y por donde respiran los críticos? Pues este grupo de militantes o, al menos, los que siguen resistiéndose a respaldar a Susana Díaz, parecen haber adquirido dos caminos diferentes: unos han optado por una posición de indiferencia ante este proceso y otros han dado ya el paso para respaldar la candidatura del consejero de Agricultura, Luis Planas.

En el primero de los grupos se situaría, por ejemplo, Francisco González Cabaña, ex secretario provincial del PSOE y actual diputado nacional. "Esta no es mi guerra. Nosotros pensamos que este proceso no tocaba ahora y que, además, está viciado desde el principio. Por eso entendemos que es una batalla inútil y le hemos dado libertad total de movimiento a nuestra gente", reflexionaba ayer en voz alta quien durante años fuera uno de los principales azotes de Griñán dentro del partido en Andalucía. Cabaña, incluso, dijo que las posiciones que adopten los militantes de su partido "serán todas legítimas" y dijo entender el cambio de postura de algunos de los que hasta ahora eran compañeros suyos dentro del sector crítico del partido "sobre todo de los cargos institucionales, que están preocupados por el futuro".

Pero en el PSOE de Cádiz hay también militantes convencidos de que Luis Planas es la persona idónea para aspirar a dirigir la comunidad andaluza. Esta corriente ha situado su cuartel general en Jerez y cuenta con Ángel López como coordinador. Una de las defensoras de Planas es Blanca Alcántara, ex parlamentaria andaluza, ex delegada provincial de la Junta y actualmente miembro del comité director del partido. "Conozco a Luis Planas desde hace mucho tiempo, sé de su valía personal y profesional y es evidente que tiene una cualificación y una trayectoria que lo sitúan con diferencia como el mejor candidato a presidir la Junta", reflexiona Blanca Alcántara, que desde sus orígenes en política se ha situado muy próxima a las tesis de Luis Pizarro.

Alcántara es de la opinión de que el proceso de las primarias debería ser retrasado "para que haya concurrencia y una auténtica democracia interna, porque sin urnas no hay democracia", apostilla. En este punto critica que se precisen tantos avales para ser candidato (casi 7.000), que la campaña sea tan corta en el tiempo y que se cuente con tan pocos medios. "Un proceso de primarias debería ser un revulsivo para el PSOE pero eso no se está produciendo", lamenta.