El PSOE ha lamentado el “perjuicio a Trebujena” que, a su juicio, supone la “polémica” decisión del alcalde dimisionario de IU, Jorge Rodríguez, quedando “retratado en su incongruencia”.

El único partido de la oposición en el Ayuntamiento trebujenero, donde la coalición izquierdista gobierna con mayoría absoluta -al sumar un concejal más que el grupo municipal socialista- considera que “Rodríguez ha antepuesto su interés personal a los intereses de Trebujena y lo ha hecho en base a una operación económica que es cuanto menos políticamente incorrecta, indecorosa e inoportuna viendo las dificultades que atraviesan tantos sectores en la sociedad debido a la crisis por la pandemia y ahora la guerra”.

El portavoz municipal del PSOE, Miguel Guerra, asegura que “en estos dos años y medio el alcalde ha demostrado que a Trebujena la ha querido poco al dedicarse a la política provincial dejando el sillón cada día siendo un alcalde ausente para sus vecinos”. “Y esa situación ha tenido un impacto directo en la gestión municipal”, añade al respecto mencionando cuestiones como “la abultada deuda que deja”, “una bolsa de empleo cerrada desde 2011” o “la falta de vivienda pública y de inversiones de empresas en el municipio con el IAE más caro de toda la provincia”.

El también secretario local de los socialistas afirma, igualmente, que “no es de extrañar que Rodríguez se haya asegurado un puesto con un sueldo de 50.258,57 euros -como presidente del Consorcio de Aguas de la Zona Gaditana-, pues es experto en aplicar la ley del embudo, ya que mientras los concejales de IU cobran 400 euros, los del PSOE cobran 0 euros por asistencia al Pleno del Ayuntamiento en base a una decisión arbitraria del propio alcalde con informe contrario del interventor”. Guerra agrega que “ese mismo puesto ha sido desempeñado durante siete años por el alcalde de Sanlúcar, Víctor Mora (PSOE), sin retribución alguna”.

El portavoz socialista, que exige a Rodríguez que “haga efectiva su renuncia cuanto antes para que el relevo pueda retomar ya una gestión municipal precaria en empleo, vivienda o en la situación económica”, censura que el también coordinador provincial de IU “lleva 15 años erigiéndose como la única voz de la izquierda, presumiendo de ser más puro que cualquier otro vecino de la localidad y no ha podido tener peor salida del cargo que esa”.

En este sentido, Guerra pregunta públicamente “¿qué deberán estar pensando los comunistas viejos, los puros, quienes lucharon en la dictadura?” y “¿dónde ha quedado su ejemplo y trayectoria?”. Asimismo, ha criticado que “no hemos escuchado a nadie de IU expresar su opinión sobre una cuestión tan indecorosa como la que ha protagonizado su máximo responsable”.