La retirada de las seis palmeras que durante décadas han formado parte del paisaje de la Plaza del Rey ya han comenzado. El gran porte de estos ejemplares obliga a una maniobra complicada que se esperaba desde hace semanas, pero que ya se podía producir para su inmediato trasplantado en el antiguo polígono de Janer que también está siendo efectivo ya.

La responsable de los trabajos de remodelación de esta céntrica plaza acomete estas labores con la maquinaria adecuada, un camión pluma de gran capacidad, como al principio de la intervención cuando se retiró el centro de esta superficie la estatua de Varela. Hasta el último momento se ha dudado de la posibilidad de actuar por el fuerte viento de levante, pero finalmente se ha puesto en marcha el dispositivo, con la colaboración de la Policía Local, en torno a las siete de la mañana. Otro vehículo de grandes dimensiones, del que ha sido necesario disponer y que ha retrasado la operación alguna semana por las características tan concretas que debía cumplir, sirve para mover los ejemplares hasta su nuevo emplazamiento. 

Una de las palmeras retiradas de la Plaza del Rey, preparada para su traslado a Janer.

La desaparición del componente vegetal ha sido una de las grandes polémicas que ha rodeado a la propuesta de transformación de la Plaza del Rey, si bien finalmente se descartó la retirada completa: de los 18 ficus existentes se quitaron seis, sin que se pierda masa verde en este espacio, defiende el gobierno municipal. Su destino era la playa de Camposoto.

Ahora las palmeras tampoco siguen ante el Ayuntamiento, y están siendo trasladadas de inmediato al polígono de Janer, que urbaniza Ten Brinke, para su trasplantado en este recinto -cuyas obras están muy avanzadas- junto al nudo de La Ardila.