La crisis interna de Ciudadanos (Cs), que trascendió públicamente hace poco más de tres meses de la mano del PSOE, su socio de gobierno en el Ayuntamiento de Sanlúcar, ha derivado en discrepancias dentro de la coalición bipartita que han llegado este martes al pleno municipal correspondiente al mes de junio.

Ocurrió cuando, en un momento de la sesión, la portavoz de IU, Carmen Álvarez, se quejó de que la Policía Local, “bajo el mandato del alcalde”, Víctor Mora (PSOE), había “echado” del Salón de Plenos a la funcionaria de empleo de este grupo municipal de la oposición. “No es la primera vez que pasa y no entiendo por qué”, manifestó sobre la “expulsión” de la periodista que ejerce de personal de confianza de los izquierdistas.

Álvarez relacionó este hecho con la negativa del Gobierno local a permitir la intervención de un representante de Ecologistas en Acción ante el Pleno del Consistorio para defender una moción registrada por esta ONG con el objetivo de instar a la Corporación a elaborar un plan municipal de medidas frente al cambio climático. La propuesta fue defendida por David Rodríguez Alhambra, el concejal que fue el candidato de Podemos a la Alcaldía en las elecciones de 2019. Mientras, en la puerta del Palacio Municipal, se manifestaban con una pancarta varios integrantes del colectivo ecologista.

El alcalde respondió a la portavoz de IU afirmando que desconocía la situación que se había producido, pero añadió que a estas sesiones asisten únicamente los ediles, no los funcionarios de empleo de los que disponen los distintos grupos municipales. Hay que señalar que desde la irrupción de la pandemia no se admite la presencia de público en las reuniones del Pleno y los concejales usan mascarilla y mantienen la distancia de seguridad anti Covid.

Aprovechando el debate sobre un asunto de carácter urbanístico, la delegada municipal del área, Lucía Rodríguez (Cs), se pronunció sobre lo sucedido. Y lo hizo “lamentando profundamente que se haya invitado a ir, no sabemos en qué términos, a la periodista de IU”. Argumentó que “en todos los plenos se ha admitido al personal de confianza” y afiló su crítica afirmando que “el derecho a la información es un derecho recogido en la Constitución, por lo que estamos totalmente en contra de que se coarte y se prohíba a una persona que es periodista ese derecho, sea del grupo político que sea”.

Empleando incluso más tiempo que la propia concejala de IU para quejarse ante lo ocurrido, Rodríguez añadió que “no se nos ha pedido nuestro consentimiento ni nuestra opinión sobre esto”, apostillando que el funcionario de empleo del Gabinete de Prensa del Ayuntamiento abandonó el Salón de Plenos precisamente cuando Álvarez estaba exponiendo su queja. Dijo expresar esta protesta en nombre propio y en el de su compañera de filas, la también delegada Ana Sumariva.

Como es sabido, estas dos concejalas son las únicas fieles a Cs que quedan en el partido naranja. Este grupo municipal lo completan los ediles díscolos Javier Gómez Porrúa, Manuel Lobato y Juan José Hernández Ponce. Solo éste último no tiene delegaciones en el Gobierno local.

La portavoz izquierdista agradeció a la concejala de Cs su apoyo y, en su posterior valoración del pleno, lamentó “la actitud caciquil y antidemocrática del alcalde, que sigue sin permitir el acceso del público a las sesiones plenarias con el único objetivo de coartar la libertad de expresión e impedir la participación”. “Incluso se ha echado a la funcionaria de empleo de IU y se ha doblado la presencia policial ante una concentración de Ecologistas en Acción en las puertas del Ayuntamiento”, censuró.

El Gobierno local hizo su balance de la reunión en una comparecencia conjunta del primer y segundo tenientes de alcalde, Gómez Porrúa y David Salazar (PSOE) respectivamente.

“Con respecto a las declaraciones de Carmen Álvarez en las que dice que se ha echado a un periodista en el pleno, le diré que es una nueva mentira. No se ha expulsado a ningún medio. Es una funcionaria de empleo que trabaja para IU y que, una vez le ha hecho fotos a Carmen Álvarez, se le ha pedido, como a todos los funcionarios de empleo, que abandone la sala porque en el pleno solo se quedan los concejales”, aseguró Gómez Porrúa.

Incidió en esta cuestión abonando sus diferencias con las dos concejalas que siguen la disciplina de Cs. “Las normas son iguales para todos y si alguien del Gobierno no está de acuerdo con las mismas, nadie está obligado a quedarse. La puerta está abierta”, dijo.