La organización agraria ASAJA pedirá la declaración de zona catastrófica para Andalucía tras haber cifrado los daños causados por la sequía y las heladas en la agricultura y la ganadería, entre octubre y febrero, en 518,6 millones de euros, sin contar con el olivar.

En total, y tras los perjucios ocasionados por la sequía y las heladas, el campo de la provincia de Cádiz ha perdido 98, 5 millones de euros.

La situación en el campo andaluz es tal que un kilo de paja, a 12 céntimos, se paga en algunos casos a un precio más elevado que un kilo de naranjas en origen, según ha explicado en conferencia de prensa el presidente de ASAJA Sevilla, Ricardo Serra.

Por heladas, ASAJA ha cifrado los daños en 167.950.015 euros, y por provincias la más afectada es Sevilla con 78 millones, seguida de Córdoba con 27,7 millones, Cádiz con 26,5 millones, Almería con 15, y Granada, Huelva y Jaén con 3 millones cada una.

Los daños por sequía en la agricultura se cifran en 160,7 millones en toda la región y por provincias la más afectada vuelve a ser Sevilla, con 57 millones, Córdoba 42, Cádiz 22, Granada 18,7, Huelva, Jaén y Málaga 6 cada una, y Almería 3.

En ganadería los daños por la sequía han sido cifrados en 190 millones en toda la región, y por provincias la más afectada es Granada con 54, Cádiz 50, Sevilla 25, Córdoba 21, Huelva 17, Jaén 10, Málaga 7 y Almería 6.

En caso de que persista la sequía, ASAJA calcula unas pérdidas en el olivar andaluz en la próxima cosecha de hasta el 40 %, lo que supondría unos 360 millones de euros más.

Además de la declaración de zona catastrófica, ASAJA propone la creación de una comisión de seguimiento para la evaluación de daños y adopción de medidas extraordinarias, moratoria en los créditos de agricultores y ganaderos respecto a cultivos y cabañas afectadas por sequía o helada y apertura de líneas de créditos preferentes por los afectados.

ASAJA solicitará indemnizaciones para daños, ayudas para la reposición de cultivos afectados, ayudas para abastecimiento de agua para ganadería y para adquisición de alimentos para el ganado.

También medidas fiscales como la exención del IBI para 2012 y exención del pago a la Seguridad Social, entre otras, además del adelanto del pago de las ayudas previstas en la PAC, agilización de pagos pendientes de la PAC, autorización excepcional de la utilización de alimentos convencionales en para el ganado ecológico, riegos de apoyo y flexibilización de las tarifas eléctricas del regadío, que contratan todo el año aunque solo utilizan tres meses.