"Estamos hechos de tal manera que lo que más nos importa saber nunca lo vamos a saber. Uno puede llegar hasta esos umbrales de la verdad..., pero más allá siempre nos aguardará la oscuridad. El arte es lo que sucede cuando se es requerido por esa oscuridad, para expresarla". Esa penumbra de la que habla el escritor jerezano José Mateos, guía al puñado de humanos elegidos para arrojar luz en los márgenes. Desde allí, en el ostracismo que "el milagro de cualquiera de las artes" nos destina, donde "ya no somos espectadores, desaparecemos...", surge el ingenio en las entrañas.

Y en la marginalidad iluminada, a tres bandas, desde tres artes diferentes, se enfoca un mismo tema, la creación artística. Así nace el documental de Miguel Ángel Rosales sobre el pintor Juan Carmona, 'Luz en los márgenes', que se incluye en el libro 'Fragmentos sobre el arte' de José Mateos, con ilustraciones del propio Carmona. Un 'pack' de maestría que se presentará el próximo 2 de agosto, en el Teatro Pedro Muñoz Seca, a las 20,30 horas. Y de postre..., a pocos metros, la inauguración de la exposición de obras de Juan Carmona, en el Centro Cultural Municipal Alfonso X El Sabio.

Un documental (seleccionado en Alcances 2013 y premio del certamen de cortos 'Por Caracoles') que comenzó como un seguimiento al pintor Juan Carmona, sin pretensiones, sin guión. Una argumento que se hizo en el caminar. "No me propuse hasta dónde iba a llegar. Hicimos varias entrevistas salteadas a lo largo de los meses y durante ese tiempo se fue fraguando la historia que yo quería contar a través de Juan, que tiene que ver con su carrera como pintor y que también tiene que ver conmigo, porque todos ponemos algo de nosotros, o contamos algo de nosotros mismos en lo que hacemos", dice Rosales. Juan Carmona, un caminante jerezano por los senderos del arte en los que rastrear una forma de vivir, de descubrirse a sí mismo y al mundo. "Yo quería darle al documental un enfoque de todo lo que te puede llevar a crear un mundo interior, que te conduce a separarte de la realidad. Es un tipo de marginalidad, de ahí el nombre de la obra", resume el director. "Lo que refleja el documental -añade el también jerezano José Mateos- es cómo el proceso de creación de alguien, en este caso el de Juan, supone una serie de sacrificios tanto en el aspecto vital, como de esa marginalidad. Ponerse a merced de ese misterio que es la creación artística".

"Nos parecía que era una buena coincidencia presentar el libro y el documental y luego inaugurar la muestra. Así, la gente que ve la proyección luego conoce mi obra de cerca. Es una forma de que cada espectador libremente juzgue lo que ve", apunta Carmona. Un autor que asegura sentirse "abochornado de agradecimiento a Miguel Ángel, porque una persona se interese por mi obra, por muy amigo que seamos..., sin sacar beneficio de eso, durante un año y medio, pues la verdad es que es un regalo hacia la creación. Además, hecho con sinceridad y honestidad". "Y el apoyo de José Mateos -continúa- con sus palabras siempre tan lúcidas y precisas sobre el arte, no deja de crear un proyecto que me parece ilusionante y nunca me he sentido tan arropado ante un evento".

Once horas de filmación reducidas a 14 minutos. Un exhaustivo trabajo de selección que su protagonista Juan vio una vez concluido. "Otro de los ejes que mueve el documental es la amistad. Uno trata de buscar historias interesantes en lo exótico, cuando muchas veces no te has parado a escuchar con el detenimiento adecuado a gente que lleva al lado tuyo casi toda la vida. Y descubres entonces así historias muy interesantes y dignas para ser contadas", comenta Rosales.

Respecto al libro, guardado hasta ahora en los cajones de José Mateos, ve la luz en forma de ensayo sobre el arte. "Es un tanto polémico porque intento reivindicar la pintura como oficio, porque el arte se está convirtiendo en algo que tienen mucho que ver con las nuevas tecnologías. Y yo defiendo aquí el oficio antiguo, mancharse de óleo. Que la pintura diga y hable, como hace Juan, y eso lo consiguen muy pocos. Son como dinosaurios, pintores de las catacumbas que salen a la luz con su pequeña antorcha". Asimismo, la muestra de Juan Carmona que se podrá ver en el Centro Alfonso X contiene obras de 2012, sin afán de percepción, intuitivas, sin personajes, con paisajes desnudos tan sólo habitados por el propio espectador, que los hace suyos con su mirada.

Hay que destacar que el objetivo es presentar este trío de ases del arte, el documental el libro y la exposición, en Jerez y en Sevilla en los próximos meses, y seguir dando que hablar de la creación, mire por donde se mire.