Cuando se hace alusión a un artista granadino de los que, hoy, llaman media carrera; rápidamente uno piensa en el amplísimo grupo de grandes artistas que salieron de la Facultad de Bellas Artes de Granada. Podría ser uno de esos ilustres creadores que tanta trascendencia está dando a la plástica que tiene lugar en la ciudad de la Alhambra. Pues con José Guerrero se rompe la regla. Sí es uno de los grandes artistas con la denominación de origen granadina; pero no salió de esa gran especie de Factoría que son las aulas del antiguo Manicomio de Granada. José Guerrero, además tiene el nombre y el apellido del otro José Guerrero, gran pintor granadino de los cincuenta y una de las cumbres mayores de la abstracción española. El José Guerrero que, ahora, nos ocupa es fotógrafo –yo digo con rotundidad que de los de mayor interés de España-, viene de la Arquitectura técnica y su obra, personal e intransferible, es garantía de suma artisticidad y valor seguro que expande por todo el mundo, gracias al buen hacer de sus galeristas, Carolina Alarcón y Julio Criado.

A José Guerrero, Granada 1979, lo descubrimos, precisamente en el stand de Arco de la Galería Alarcón Criado hace unos años y, desde entonces, hemos visto su obra siempre rodeada de la mayor expectación y con el claro marchamo de trascendente pieza de importancia para las miradas avispadas de los mejores coleccionistas. Su trayectoria está sustentada por muy buenos reconocimientos en lo mejor de la fotografía, por lo que su historial goza de una importante significación. Baste decir que, en 2005, recibe la Beca de la, entonces, Caja San Fernando al Joven Autor Andaluz. En el 2007 obtiene la Beca Iniciarte de la Junta de Andalucía. Un año más tarde tiene un gran éxito en PhotoEspaña, recibe los Premios Purificación García y Caja Madrid y es artista residente en el Colegio de España en París. En 2010 obtiene los Premios María José Jove e Imaginera. Ese mismo año recibe la Beca Manuel Rivera, desarrollando un proyecto fotográfico en el estado de Arizona, en colaboración con Mark Klett, artista norteamericano y profesor de la Universidad de Phoenix. El año 2015 consigue la Beca de residente en la Academia de España en Roma, donde desarrolla la serie 'ROMA'; asimismo, ese año participa en el proyecto 'Art Situacion', comisariado por María Corral, Lorena Martínez, Vicente Todolí e Ilaria Gianni, expuesto en el MACRO de Roma, en Villa Croce de Génova y en el Matadero de Madrid. En 2017 recibe el Premio Internacional de Fotografía Pilar Citoler. Su fotografía se encuentra en importantes colecciones y museos nacionales e internacionales, en el Amon Center Museum, en el Center for Creative Photografy de Arizona, en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, en la Colección DKV, en la Fundación Mapfre, en la Colección Pilar Citoler o en la Colección Los Bragales, entre otras.

José Guerrero, ante una de sus obras.

José Guerrero no es, ni mucho menos, un fotógrafo al uso; su obra va más allá de la mera representación, de la ilustración bien estructurada de una determinada realidad. El artista dimensiona la propia realidad para que esta ofrezca muchas más circunstancias que las que la propia mirada atisba y asimila. Crea espacios indefinidos, lugares aleatorios que pierden identidad física y visual para ganar nuevas e impredecibles circunstancias. Sus series transcurren por fronteras inestables entre esa fotografía que genera desenlaces de justa proporcionalidad representativa y posiciones no concretas que definen una abstracción esencial donde la plasticidad y el sentido de la forma juegan un papel de máximos.

En la actualidad la obra de José Guerrero se presenta en su galería de siempre, la sevillana Alarcón Criado, que ofrece una colección de piezas donde la forma plástica llega a su postrera dimensión. Con esta serie de José Guerrero, titulada BRG, la fotografía llega a la más absoluta esencialidad. La representación se ha desprendido de todo lo concreto y visual para crear formas estrictas de color que abren las máximas perspectivas de una abstracción pura, de una racional geometrización que rompe las perspectivas rigurosas de lo que capta la mirada. La exposición parte de la obra del arquitecto mejicano Luis Barragán, único arquitecto mejicano ganador del Premio Pritkzer, cuyos trabajos se basan en una arquitectura limpia, muy racional, llena de superficies vacías y con el apoyo estructural del color. José Guerrero aborda espacios de gran sencillez, limitados por la rigurosidad de formas cromáticas que geometrizan la propia estructura representada creando formas esenciales, rigurosamente dispuestas para que lo abstracto desarrolle sus infinitas marcas posicionales.

En BRG, la fotografía aborda nuevas dimensiones, abriendo infinitas perspectivas y diluyendo los límites de la propia representación. José Guerrero con esta serie nos vuelve a situar en espacios alternativos donde la realidad se nos ofrece fuertemente condicionada para que pierda sus valores ilustrativos y consiga posicionarse en desenlaces plásticos que cuestionan el propio razonamiento fotográfico al uso.

La serie BRG se presentará en París Photo 2021; Feria patrocinada por J P Morgan, donde la galería Alarcón Criado participa. Precisamente una de las obras de José Guerrero de esta serie ha sido adquirida para formar parte de la prestigiosa JP Morgan Chase Art Collection.

En la obra de José Guerrero la fotografía se nos hace absoluta pintura abstracta, desarrollos imposibles de lo real que truecan sus perfiles físicos en formas lúcidas llenas de composición, estructura interna, desenlaces cromáticas y suma plasticidad. En definitiva, sabios juegos formales donde la fotografía adquiere un nuevo, mágico y eterno sentido.